Público
Público

Rock para curar las heridas del 11-S

La tragedia de 2001 inspira un filme musical que se estrena mañana en Nueva York

ROBERTO ARNAZ

A las 8:46 de la mañana del martes 11 de septiembre de 2001, algo cambió en los neoyorquinos, en la ciudad y en todo el país. Los ataques a las Torres Gemelas provocaron sentimientos encontrados en los casi 8,5 millones de habitantes de la capital del mundo. Historias de resistencia, duelo, ira, culpa, miedo, amor y frustración que sustentan Clear Blue Tuesday, una película musical que echa sus raíces en los atentados terroristas que se cobraron la vida de casi 3.000 personas para contar cómo una tragedia de esa magnitud puede cambiar la vida de las personas.

La arriesgada cinta, dirigida por la desconocida Elizabeth Lucas, se inicia el día de los ataques, pero no se centra en ellos, ni los muestra en pantalla. El corazón de la película está puesto en las historias personales de 11 neoyorquinos, unos personajes a los que sigue en los distintos aniversarios de los ataques para mostrar cómo la tragedia de la Zona Cero hace evolucionar sus vidas y no siempre para bien.

Lucas tardó seis años en atreverse a narrar la historia que llevaba en su cabeza desde las jornadas posteriores a los atentados. Con un presupuesto inferior al millón de dólares y sólo 19 días en el plan de rodaje, la directora tuvo que recurrir a favores para poder terminar la película. Gracias a sus amigos y las redes sociales, Lucas consiguió rodar en escenarios que fueron testigos de la tragedia y a los que, de cualquier otra manera, jamás habría podido acceder. Entre las localizaciones destacan una oficina del emblemático Rockefeller Center, el hotel Ritz-Carlton y un piso entero del edificio número 7 del World Trade Center, a sólo unos metros de donde se levantaban las torres gemelas.

La directora se puso en contacto con un grupo de actores, cantantes y músicos, y a partir de sus vivencias, hiló una historia que carecía de guión previo. Entre ellos estaba la veterana Jan O'Dell, de 75 años, herida de gravedad en los atentados al golpearle en la cabeza fragmentos de una de las torres, que decidió participar en la película para exorcizar sus propios demonios. O'Dell canta la canción El día que el cielo cayó sobre nosotros, en la que recuerda su experiencia y cómo llegó a sentirse culpable 'por haber sobrevivido'.

Las heridas que dejó el 11-S siguen abiertas y la mayoría de los medios neoyorquinos han reaccionado contra la película. The New York Times, que contribuyó al nacimiento de la polémica con un artículo sobre el próximo estreno de la película, asegura que 'sólo los amantes incondicionales del género musical y coleccionistas de todo lo relacionado con el 11-S serán capaces de digerirla'.

New York Magazine asegura tener 'muchas dificultades para asimilar la idea', mientras que Time se pregunta si 'no es demasiado pronto para este tipo de representación artística'. La crítica más dura ha llegado del diario online Gawker: 'No importa lo buena que sea, Clear Blue Tuesday ofrece un tratamiento de musical, con música y baile, a uno de los momentos más sagrados de nuestra historia'. Sólo una publicación la ha defendido: el columnista de The Huffington Post Jasón Linkins se queda con la convicción 'del poder curativo del arte'.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?