Los ganaderos se han cansado. Creen que su prestigio ha salido lastimado desde que estalló el positivo de Alberto Contador. Los productores de carne de vacuno están indignados por las acusaciones del ciclista en el sentido de que la carne adquirida en un establecimiento de Irún estaba contaminada con clembuterol. Por eso, han decidido actuar.

La Asociación Española de Productores de Vacuno de Carne (Asoprovac) acaba de trasladar sus denuncias a la Fiscalía General del Estado para que investigue. El pasado 4 de octubre ya enviaron un escrito al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino y a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria para que se esclareciera la posible veracidad de los hechos relatados por Contador. Han pasado 50 días y, al no tener noticia alguna, Asoprovac se ha dirigido a la Fiscalía para que inicie inmediatamente de oficio una investigación y se depuren 'de una vez por todas' las responsabilidades pertinentes.

'Las palabras de Contador son en realidad una acusación de un delito contra la salud pública porque apuntan a un uso indebido de sustancias prohibidas en el ganado', explica César Martín Aranda, representante legal de Asoprovac. 'Hemos decidido trasladar nuestras denuncias al ministerio fiscal para que investigue hasta sus últimas consecuencias', añade Martín.

Los ganaderos no comprenden que, tres meses después de los hechos narrados por Contador (el ciclista fue informado por la UCI de su positivo el 24 de agosto), éste no haya interpuesto una denuncia por el supuesto delito contra la salud pública del que, según su versión, ha sido víctima: '¿Por qué no ha denunciado Contador al carnicero?'. Asoprovac instó al ciclista en su momento a que lo hiciera.

'Somos un sector perjudicado por las palabras de un señor. Si esto no es cierto, que se diga. Y si hubo carne contaminada, que pague el que la haya utilizado', señala el abogado de los ganaderos, que se quejan de que el vacuno de carne se ha visto involucrado en el caso Contador y su imagen ha sido dañada de forma gratuita sin aportarse, hasta el momento, prueba alguna.

Público contactó este lunes con el portavoz de Alberto Contador, quien prefirió no pronunciarse: 'Hemos leído la noticia y no vamos a hacer ningún comentario'. En la conferencia de prensa en la que Contador dio su versión de los hechos, declaró que no quería ir contra la carnicería, ni siquiera facilitar su nombre, 'para no causarla perjuicios'.

Desde la federación española de ciclismo tampoco entraron a valorar eset lunes el traslado del caso del solomillo a la fiscalía. 'Debo mantenerme al margen de esto', señaló su presidente, Juan Carlos Castaño.

La clave del caso se centra en el origen de la carne comprada en Irún. Se trata de establecer la trazabilidad de la carne. Es decir, trazar el trayecto del solomillo en sentido inverso: de la carnicería hacia la granja de origen. 'Pero la trazabilidad es más difícil de aclarar cuanto más tiempo transcurra', señalan los ganaderos. Desde la asociación aseguran que cada año se llevan a cabo 20.000 análisis de muestras y ninguna ha dado positivo por clembuterol desde hace muchos años. 'Es un asunto serio porque un ganadero puede ir a la cárcel por esto', sentencian.