Con la enfermería más llena de lo que desearía y obligado a salir a la palestra para enfriar el incendio que el jueves prendió Sandro Rosell al apostar por un 5-0 en la final de Copa. Así prepara el partido de esta noche ante el Villarreal Pep Guardiola.

Calculando cómo gestionar el cansancio de sus jugadores por un lado incidió el técnico en el viaje 'inhumano' que han hecho esta semana los tres argentinos del equipo: Messi, Mascherano y Milito y por el otro, la repercusión de las palabras del presidente, que añadió de coletilla a su aventurado pronóstico un inoportuno 'como siempre'.

'No conozco mucho a Rosell, pero me parece una persona sensata y creo que su intención no era la de ofender al Madrid', terció este viernes el preparador que, más allá de disculpar al dirigente, recordó en varias ocasiones 'que es la máxima representación del club'.

'No soy nadie para dar consejos, pero en mi opinión se podría haber evitado', prosiguió Guardiola. 'Yo las he hecho más gordas, pero hay cosas que son material sensible', insistió antes de calificar de 'imposible' un 5-0 del Barça al Madrid en Mestalla.

Quiso el de Santpedor desvincular el resbalón de Rosell del comportamiento habitual del vestuario: 'Desde que yo soy el entrenador, hemos respetado al contrario. Intentamos no hacer ostentación en la victoria y felicitar al rival cuando perdemos'. Y echó mano del sentido del humor para zanjar el asunto: 'Lo que dijo lo hizo en un acto para una causa solidaria y, según me comunicó, cuanto más alta es la apuesta más alimentos se consiguen para la gente que lo necesita. Por eso yo hubiese apostado por un 60-0, eso es lo único que le he reprochado al presidente'.

En lo deportivo, comenzó hoy un mes de máxima exigencia para los azulgrana. 'Aunque en esta fase lo que marca la diferencia es el deseo de ser o no campeón; no es una cuestión ni física ni táctica', advirtió el entrenador del Barça.

Celebra Guardiola que Messi no haya regresado lesionado de la jornada de selecciones, aunque ha visto 'muy cansados' a los tres argentinos. Sin Xavi, sancionado, y con Puyol, Maxwell, Pedrito y Abidal (que este viernes pasó por el Camp Nou a ver sus compañeros) de baja, el concurso de Milito y Mascherano parece también imprescindible.

Más allá de las ausencias y de lo peligroso del rival, la plantilla azulgrana se sacude la presión de cara al duelo de hoy. 'Este año tendremos que ir de nuevo al Bernabéu a ganar la Liga', auguró Guardiola. Aún así, si el Barcelona vence al Villarreal se asegura llegar y salir del clásico como líder pase lo que pase en Madrid.

'El equipo habrá cumplido aunque no gane nada esta temporada, pero sé que tenemos que ganar porque si no será una mala campaña', reconoció el técnico azulgrana, quien, en una entrevista emitida hoy por la Rai, aseguró que su etapa en el Barça 'se está terminando'. 'Estoy bien aquí, pero cuando estás en un club como este no te puedes quedar mucho tiempo', aseguró.

Superado uno de los peores momentos de la temporada, el Villarreal recibe al líder tras ganar al Athletic en la Liga y eliminar al Bayer Leverkusen en la competición europea. Garrido no podrá contar hoy con Senna y Ángel, lesionados. 'Entramos en la fase decisiva de la temporada y es el momento de darlo todo ', convino el entrenador valenciano. 'Ganar un partido así nos hace un equipo grande y debemos conseguirlo entre todos', abundó. Tras un inicio de campeonato fantástico, el Villarreal es tercero en la tabla. Al final, Nilmar, con problemas físicos entró en la convocatoria.