El defensa del FC Barcelona Eric Abidal ha mantenido que el objetivo de su equipo en este final de temporada es conseguir los títulos de la Liga y de la Liga de Campeones y negó que los azulgrana hayan empezado a pensar más en asegurarse la segunda posición del campeonato, pues dijo tener una 'pequeña esperanza' de alcanzar al Real Madrid, o en centrarse únicamente en las semifinales de la competición europea ante el Manchester United.

'Somos competidores y todos queremos quedar primeros. Cada vez quedan menos partidos y está difícil porque hay una diferencia de nueve puntos, pero queremos ganar y esperar a que el Real Madrid falle', explicó, antes de añadir que no hace estas declaraciones 'de cara a la galería ni para tener contento a nadie, sino porque es el objetivo del equipo desde principios de la temporada y porque lucharemos hasta el final'.

Abidal también negó que el objetivo ahora en la Liga sea mantener la segunda posición y mantuvo que quieren ganar los seis últimos partidos para agotar sus opciones de conseguir el título, lo cual, en todo caso, considera es también la mejor manera de asegurar la segunda plaza, a la que también opta el Villarreal. De la misma manera, explicó que no dejan el derbi ante el RCD Espanyol en segundo plano respecto al choque contra el Manchester.

El francés aludió entonces a su 'pequeña esperanza' de alcanzar al Real Madrid en la Liga y también apuntó que el derbi 'es importante para encarar con más ganas' el partido ante los ingleses. Con todo, reconoció que está siendo 'decepcionante' encajar goles que han impedido victorias que ya estaban encaradas, como le ha pasado al Barcelona en varios partidos (empates en Huelva y en Almería y derrotas ante el Betis y el Atlético de Madrid).

A su juicio, es difícil encontrar una explicación a estas remontadas, aunque apuntó que 'puede ser una cuestión psicológica de miedo a no hacerlo bien o de no acertar'. Abidal también admitió que no está contento con su rendimiento y aludió igualmente a 'un factor psicológico' que le ha hecho perder confianza. Incluso, señaló que se planteará hablar con el técnico Frank Rijkaard para que reconsidere su titularidad 'para no perjudicar al equipo'.

El internacional galo explicó sobre su situación que no quiere buscar 'excusas', pero que se trata de su primera temporada en el Barcelona, 'a un club nuevo en el que la manera de trabajar es diferente y también son diferentes los horarios de los partidos, ya que se juega muy tarde'. 'Las costumbres también afectan. Al principio no tuve problemas, pero ahora quiero adaptarme lo más rápido posible y dejar que eso no me afecte', afirmó.