Muy pocas cosas pueden alegrar a una deportista después de una rotura del ligamento cruzado de la rodilla, pero si los aficionados y expertos del baloncesto femenino la bautizan como mejor jugadora europea del año, el trago puede ser menos amargo. Alba Torrens (Mallorca, 1989) habrá recibido, con la pierna aún inmovilizada, la noticia de que nadie mejor que ella ha jugado al básquet en el continente durante el pasado año. La española recibió de 17.773 votos por parte de los aficionados, mientras que de los expertos logró 240 votos en la macroencuesta organizada por la FIBA. Alba Torrens se impuso en la votación a la rusa Maria Stepanova.

Es el premio a un fantástico año que convirtió al Perfumerías Avenida de Salamanca en campeón de Europa, y a Alba, en la mejor jugadora de la fase final. Con 19 años ya fue elegida en el puesto 37 de la WNBA y hubo quien la bautizó como la Ricky Rubio del baloncesto femenino, aunque en realidad siempre le ha ido más el juego de Juan Carlos Navarro.

Viene este premio a hacer más corta la espera para el regreso a las canchas después de la grave lesión sufrida a mediados de enero con el Galatasaray turco, su nuevo equipo esta temporada. Alba se torció la rodilla después de pisar a una jugadora tras alcanzar un rebote. Las pruebas en Estambul confirmaron que el ligamento estaba roto, y las esperanzas de hacer otra buena temporada también quedaron quebradas. Ya tendrá que pensar en la que viene después de que el periodo de recuperación se estime en unos seis meses.

El presidente de FIBA Europa, Olafur Rafnsson, calificó a Alba Torrens como una 'fantástica jugadora y maravillosa persona'. 'Espero que este premio le sirva como señal de que este 2012 puede ser tan bueno para ella como fue el 2011 tras el inicio desafortunado que ha tenido'.