Una Eurocopa, dos Ligas de Campeones, una Intercontinental, cuatro Ligas, tres Supercopas de España y una de Europa. No es fácil para alguien con tan amplio y brillante palmarés apreciar como lo hizo Iker Casillas el Premio de Público al Mejor Jugador de la temporada pasada, resultado de una encuesta realizada por nuestro diario entre los directores deportivos de los veinte clubes de Primera, y en la que el barcelonista Messi salió elegido mejor extranjero.

La cita con el guardameta del Madrid y de la selección fue el pasado martes en la redacción de Público. Acompañado de Luis Villarejo, director de comunicación de su club, Iker mostró su habitual simpatía. Repartió sonrisas y firmó autógrafos, pues no en vano el mostoleño también ostenta el galardón de futbolista español más mediático del momento. Tras saludar al director de Público, Ignacio Escolar, quien le hizo entrega de un álbum con las portadas y las numerosas páginas de las que ha sido protagonista, Casillas realizó una breve visita por la redacción. A continuación, se procedió a la concesión del premio. Así, el subdirector, Jesús Maraña, le entregó una réplica de la portada de Público en la que se publicó su galardón y no tuvo reparos en confesarle su condición de colchonero. “Pues no sabes el morbo que me da que me lo entregues tú”, respondió Iker.

A título personal, Casillas ha ganado un Trofeo Zamora al portero menos goleado de la última Liga y un Trofeo Bravo, premio que concede la revista italiana Guerin Sportivo a la mejor promesa del fútbol europeo, en 2000. Sin embargo, y como el propio futbolista reconoció, no es habitual que los porteros sean elegidos los mejores de un campeonato. Sirva de ejemplo el prestigioso Balón de Oro, que designa al mejor jugador de Europa. Pese a tener vigencia desde 1956, sólo un guardameta lo ha ganado. Fue en 1963, con el ruso Yavhin como afortunado protagonista.

Iker agradeció el premio, aún más por ser el primero, y confesó lo difícil que le sería repetir la temporada que viene. El Premio de Público al Mejor Jugador de la Liga 07-08 podría ser la antesala al Balón de Oro, en cuya disputa Casillas no debería faltar. Iker no se quiere hacer ilusiones y, de hecho, no está nada convencido de que pueda ganarlo. Por méritos recientes, palmarés y carisma, no será.