Cansado de la inmovilidad del Arsenal y de que su pretendido fichaje por el Barcelona se haya convertido en la historia interminable e interminada de los dos últimos veranos, Cesc Fàbregas ha decidido modificar su estrategia, apretarle las tuercas al club inglés y no participar de la gira asiática que mañana iniciará el equipo que aún capitanea. Por más que el club londinense se escudase ayer, en su página web, en las supuestas molestias musculares que durante esta semana han apartado al centrocampista catalán de los entrenamientos del grupo, la previsible ausencia de Cesc en la pretemporada del Arsenal no es consecuencia de ninguna lesión. Una cuestión de dinero y también contractual renovó hasta 2015 le retiene en Londres: el Arsenal no está dispuesto a venderlo por menos de 40 millones de euros pide 45 yel Barça no quiere llegar a esa cifra para recuperarlo, por más que Guardiola lo haya etiquetado como prioritario en su lista de fichajes para el próximo curso.

De modo que, según pudo confirmar este diario de fuentes cercanas al futbolista, Cesc ha optado por endurecer su postura y, sin declararse abiertamente en rebeldía, no participar de las actividades del equipo londinese. Para intentar desatascar y acelerar las eternas negociaciones, el centrocampista no se ha entrenado durante toda la semana con sus compañeros ha permanecido en el gimnasio, preparándose con un entrenador personal ni, salvo cambio súbito de última hora, disputará los primeros partidos promocionales del equipo inglés, en Kuala Lumpur (Malasia), el próximo día 13, y en Hangzhou (China), tres días más tarde.

El catalán no se ha entrenado durante toda la semana con sus compañeros

De momento, sin embargo, Arsène Wenger no da su brazo a torcer. Lejos de facilitar su salida del Arsenalcomo supuestamente le prometió a Cesc, tras convencerlo el verano pasado para que permaneciera un año más,el técnico francés anuncia que luchará por retener a su capitán. 'Nuestra postura sigue siendo la misma: queremos retener a Cesc y lucharé todo lo duro que pueda para que así sea', advirtió ayer Wenger, en la página oficial del club inglés. 'Cesc no viajará a Asia porque tiene un problema muscular. Se quedará en Londres y se entrenará aquí', añadió el técnicofrancés. Conocía la postura del medio catalán y optó por hacerse fuerte antes de que suequipo emprendiera viaje.

Poco dado hasta ahora a los gestos rebeldes, Cesc no ha encontrado ya otro modo de ejercer presión sobre su técnico, nada dispuesto a dejarle marchar por menos de los 40 millones de euros con los que el Barça pretende recuperar al centrocampista llamado a suceder a Xavi. Hace semanas que Sandro Rosell hizo pública su oferta. 'No nos volveremos locos; no pagaremos más de 40 millones por Cesc', advirtió el presidente azulgrana. Antes, ya había anunciado que el club disponía de 45 millones de euros para los fichajes de este verano. Con ellos (más lo que obtenga en posibles ventas de jugadores), pretende satisfacer a Guardiola y contratar al capitán del Arsenal y al chilenoAlexis Sánchez.