Estuvo a sólo cuatro segundos. Beatriz Pascual, la marchadora barcelonesa, tuvo la medalla de bronce a tiro en el kilómetro 15, cuando Sokolova, la tercera rusa, parecía a su alcance. Pero en las tres últimas vueltas la barcelonesa pagó su esfuerzo. Rusia ha copado el podio de los 20 kilómetros marcha. El calor ya no derrite a sus atletas.

Olga Kaniskina ha impartido una lección magistral esta mañana en Barcelona. La marchadora rusa, número uno del mundo, campeona olímpica, prodigio de técnica, estética y fluidez, se fue del grupo en el quinto kilómetro, impuso un ritmo tremendo y se ha proclamado campeona de Europa con 1h27:44 tras una exhibición impresionante.

Segunda ha sido su compatriota Kirdyapkina (1h28:55) y tercera Sokolova (1h29:32). Triplete ruso, el primero de los campeonatos. Por parte española, Pascual terminó quinta (1h29:52) y María José Poves, que pasó por el terrible trance de enterrar anteayer a su padre, llegó undécima, con 1h34:19.

Vasco marchaba en el grupo con muchas posibilidades de luchar por el bronce

Ha sido una lástima la retirada de María Vasco, la ganadora de la Copa del Mundo 2010, que marchaba en el grupo con muchas posibilidades de luchar por el bronce pero se ha visto obligada a retirarse.

La barcelonesa ha sufrido una rotura muscular en los músculos isquiotibiales de la pierna derecha en el kilómetro 11. La imagen de Vasco llorando desconsolada apoyada en las vallas del circuito barcelonés resumen la impotencia, la dureza y la injusticia que en ocasiones se asoma al deporte.

'El atletismo puede ser cruel' solía decir el gran decatleta Daley Thompson. 'El maratón puede humillarte' afirmaba el gran Bill Rodgers. La marcha también.