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Forlán se baja en marcha del Atlético

Los rojiblancos visitan Guimaraes sin fiarse de la ventaja de la ida

 

MIRIAM DE LA NOGAL

El Atlético no consigue concentrar la atención en el césped. Poco antes de partir rumbo a Guimaraes, para disputar la vuelta de la última ronda previa de la Liga Europa, un imprevisto sacudió la expedición: Forlán se bajaba personalmente de la partida.

El día anterior por la noche Manzano le incluyó en la convocatoria, pero por la mañana fue el propio uruguayo, uruguayo quien le pidió al técnico que le dispensara 'por no sentirse comprometido con el equipo'. El goleador de Hamburgo vive sus últimas horas como jugador del Atlético.

'Me ha llamado y me ha pedido no viajar debido a que hay interés de otros equipos en su contratación y, jugándonos lo que nos jugamos mañana, he decidido que se quede'. Manzano trató de aparentar normalidad en la decisión de un futbolista al que la entidad ya le ha puesto la cruz. 'Ahora lo que prima es la eliminatoria y que los jugadores estén al cien por cien. Él no está en ese sentido, me lo ha pedido y la mejor decisión es la que se ha tomado. Esperemos que no haya contratiempos y no nos acordemos de él'. Forlán negocia con el Inter de Milán, que quiere rebajarle la ficha y que ya ha fijado con el Atlético un precio a la operación: cinco millones de euros.

Así que sin el uruguayo, como en la ida, el Atlético tendrá que manejar la jugosa renta con la que llega de Madrid. Un 2-0 que permite mirar con cierto optimismo hacia la clasificación para la fase de grupos de una competición que el Atlético conquistó hace dos temporadas. Tampoco estará la nueva esperanza rojiblanca, Falcao, no inscrito en la competición, ni Arda Turan, aún entre algodones, ni el sancionado Domínguez, el central principal del equipo. Los portugueses tampoco llegan enteros: no estarán los lesionados Paulo Sergio y Maranhao ni el central Joao Paulo, expulsado en la ida.

Manzano no tiene intención de mover su alineación con respecto a la ida. Sólo la obligada en el centro de la defensa y, si acaso, la entrada del goleador Elías (autor de los dos tantos de la ida) por Salvio. Pero Portugal enciende al argentino, que jugó en el Benfica el curso pasado.

Pese a la tranquilidad a la que invita el resultado actual, los rojiblancos huyen del exceso de confianza. Manzano, desde luego, lo tiene claro: 'Va a ser un partido difícil y duro. Tenemos un resultado tranquilizador, esperanzador, pero no definitivo'. Y el lateral Silvio, que vuelve a su tierra, comparte inquietud con su preparador: 'Ya fue complicado en el Calderón y lo será más aquí'.

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