Público
Público

Ibra aplaza el reencuentro

Guardiola no se verá las caras con el exazulgrana que, lesionado en el último ensayo, se pierde el estreno europeo con el Milan

NOELIA ROMÁN

La última vez que Barcelona y Milan se vieron las caras, el Camp Nou estaba de fiesta y la hinchada azulgrana, entretenida en observar si la magia de Ronaldinho aún podía imponerse a sus generosos kilos. Ibrahimovic formaba con la zamarra azulgrana y el filósofo, a la sazón Pep Guardiola, seguía tan de cerca al delantero sueco como la grada las miradas entre entrenador y jugador. El Barça se presentaba en sociedad ante su afición, en el Joan Gamper de 2010, y el conflicto, ya manifiesto, entre Guardiola y el delantero sueco, latía tan fuerte como las ganas de Messi, Puyol y compañía de homenajear al Gaúcho por todos sus buenos momentos de fútbol.

Apenas unos días más tarde, con cajas destempladas, Ibrahimovic retornaba al Milan echando pestes del técnico catalán, su antiguo valedor y, desde entonces, 'el filósofo'. Su reencuentro, pues, se esperaba desde el día en que el sueco rebautizó al de Sant-pedor. Y así seguirá siendo. Ibrahimovic no comparecerá esta noche en el Camp Nou, en el estreno europeo del vigente campeón ante el Milan. Guardiola no podrá siquiera amagar un hipotético saludo. Ibra sufrió una lesión 'no demasiado grave' en los isquiotibiales en el último entrenamiento de los italianos y no viajó a Barcelona junto a Zambrotta y Van Bommel, los otros dos exazulgrana en las filas lombardas, y al resto del equipo.

De modo que la expectación, indudablemente morbosa, que se había disparado cuando se conoció el sorteo, se desinfló al trascender la noticia. 'El fútbol le pertenece a los jugadores, la gente va a ver a los más grandes e Ibra es uno de ellos. Es una pena que no pueda estar', expuso Guardiola, sobrio, en su primera respuesta ayer. 'Nada de lo que pasó o dijo cambia mi opinión sobre él: siempre me pareció un fantástico jugador y después de tenerlo, aún más; es de otro nivel. Le agradezco todo lo que nos dio, cómo nos ayudó a ganar la Liga y me alegro de que ahora esté feliz en Milán. Le deseo una pronta recuperación', zanjó el técnico del Barça.

Con la ausencia de Ibra quedó desactivada la circunstancia más amarilla del choque con el que el Barça comenzará a defender su título y, de paso, una de las bazas del Milan, el último equipo que logró, hace más de dos décadas, conquistar la Copa de Europa dos años consecutivos, aspiración de los azulgrana este curso. 'Para nosotros perder a Ibra es como para el Barça perder a Messi, pero ganaremos en otras cosas con su sustituto', desdramatizó Massimiliano Allegri. 'Él estaba tranquilo e ilusionado por jugar este partido, como cualquiera frente a un reto así', añadió el técnico del Milan, ante la insinuación de que el sueco podría haberse borrado del partido.

El hecho puede rebajar tensión, pero no la liturgia, la excitación y el respeto con los que el Barcelona aguarda al Milan. El empate en Liga, ante la Real Sociedad, ha resultado ser más un acicate que un factor de duda entre los azulgrana. 'Queremos recuperar las sensaciones de ganar', anunció Iniesta. También el Milan igualó frente al Lazio y el traspié y las bajas (Robinhno tampoco estará) no le han restado ni un ápice de confianza a los rossoneri. Allegri, que tendrá que recomponer su esquema por la baja repentina de Ibra, se conforma, sin embargo, con el empate. 'Me gustaría ese resultado, sí', confesó el técnico. Ha escudriñado las debilidades azulgrana y, frente al toque y la fantasía del Barça, propone la robustez defensiva de su pareja de centrales, la veteranía de Seedorf en la medular y la eficacia de Pato en el frente.

Guardiola, seguro de que sus jugadores no precisarán alicientes para este duelo 'No es un peso, sino un honor defender el título y enfrentarse al Milan', no podrá contar con Alexis ni Piqué, pero sí con Puyol, listo para sumar los primeros puntos ante el rival más fiero de la liguilla.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?