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El "invierno nuclear" congela la NBA

Los jugadores rechazan la última oferta

ALBERTO CABELLO

El riesgo de un año en blanco en el baloncesto profesional americano es bastante más alto tras el día de ayer. Las opciones de un acuerdo inmediato quedaron hechas añicos después de que el sindicato de jugadores rechazara la última propuesta de los propietarios. Fue un 'no' tajante. 'Las negociaciones están completamente rotas. La temporada corre serio peligro', dijo en una breve comparecencia de prensa el representante sindical Billy Hunter. 'Ahora no hay nadie con quien negociar, el proceso judicial podría durar años. Billy Hunter ha puesto en riesgo la disputa de la temporada', respondió al rato David Stern, comisionado de la liga. Nadie da su brazo a torcer.

Y es que la negativa a la última oferta de la NBA ha forzado a los jugadores a disolver el sindicato. Sin representación legal, ahora los profesionales podrán denunciar a la patronal por prácticas de monopolio. La propuesta de disolución ha de ser presentada a la National Labor Relations Board (NLRB) que debe establecer un calendario para unas elecciones que se celebrarían en un plazo de entre 45 y 60 días. Esto no quiere decir que los contactos entre patronal y sindicato queden paralizados durante ese periodo. Esta decisión de los jugadores no es más que un órdago a las franquicias en busca de un acuerdo satisfactorio.

Las conversaciones están rotas y la temporada corre serio peligro

La NFL, la liga de fútbol americano, llegó a este mismo punto de no retorno y finalmente se pudo llegar a un acuerdo que salvó la temporada. David Bois, abogado experto en cuestiones antitrust, ya trabajó con los jugadores de fútbol en este mismo escenario y ahora está en la nómina de letrados de las estrellas de la canasta.

El problema de la NBA es que el calendario corre en su contra. Descartada la temporada de 82 y 72 partidos, el horizonte atisbaría, en caso de fumata blanca, una liga regular de unos 50 encuentros a partir de principios de enero como ya sucedió hace 13 años. El tope máximo para arrancar la competición sería alrededor del 10 de enero. 'Nos aproximamos a un invierno nuclear', dijo Stern ayer en sus declaraciones a los medios.

El bloqueo de la situación en Estados Unidos tiende puentes aún más cómodos para que las estrellas firmen contratos temporales con equipos europeos. De momento, los hermanos Gasol, Calderón y Ricky estarían ante la tesitura de fichar por algún club de la ACB. El Real Madrid, mientras, se frota las manos; el riesgo asumido en la contratación temporal de Rudy Fernández y Serge Ibaka le ha dado recompensa.

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