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Júbilo con suspense en Mestalla

El Valencia logra un agónico triunfo ante el Betis (3-2) tras quedarse con un hombre menos y asciende al tercer puesto liguero

AGENCIAS

El Valencia logró en inferioridad una victoria épica ante un buen Betis, en un partido que dominó en el primer tiempo, que jugó a merced del rival al comienzo de la segunda parte y que resolvió con un futbolista menos tras la expulsión de Carlos Marchena. El Valencia impuso su ley hasta la lesión de Edu frente a un Betis que jugó bien, reaccionó tras el descanso, empató y perdió cuando tenía el partido para ganarlo.

Tras dos partidos perdidos de forma consecutiva en Mestalla (ante Racing y Sporting), el Valencia recuperó, al comienzo del encuentro, la iniciativa en el juego que le caracterizó en los primeros encuentros del campeonato, volvió a imponer su ritmo en casa y, por ello, mandó con autoridad en el tramo inicial del duelo.

La presencia de Baraja y Edu en la construcción del fútbol local propició los dos goles que el Valencia logró antes del descanso, en ambos casos a pase de Edu, jugador que, cuando mejor se encontraba, tuvo que abandonar el terreno de juego como consecuencia de una lesión.

El Betis, mientras tanto y a pesar de sus jugadores se apoyaban continuamente y desarrollaban un fútbol más que aceptable, no era capaz de neutralizar el juego desenvuelto de su rival y sus aproximaciones a la meta de Renan eran escasas y poco productivas. La conexiones entre las líneas del Valencia funcionaban y el balón llegaba con cierta ventaja a sus atacantes, que dispusieron de alguna ocasión de gol más de las que resolvieron antes del descanso.

Sólo en los cinco minutos finales del primer periodo, tras la lesión de Edu y la obligaba entrada de Manuel Fernandes, que no había calentado, llevó verdaderamente la iniciativa el equipo sevillano, pero sus opciones en ataque no revistieron verdadero peligro. La segunda parte dio comienzo con el Betis volcado sobre la meta del Valencia y con una segunda lesión en el equipo local, lo que obligó a Albiol a entrar en el campo en sustitución de Alexis.

El Betis presionó, se adueñó del partido, buscó el gol y lo encontró por medio de Juanma, ante un Valencia que nada tenía que ver con el equipo de la primera mitad, por lo que el partido se puso, claramente, para el empate del Betis, ya que el equipo local había perdido completamente el norte, sin orden, ni criterio.

Llegó éste en un penalti acompañado de la expulsión de Marchena, en una acción muy extraña y llena de rebotes, lo que convirtió el 2-0 con el que se llegó al descanso en un partido en el que al Betis, amo futbolístico del choque en esos momentos, le restaba media hora de superioridad numérica para tratar de ganar.

Sin embargo, cuando al Valencia no le quedaba aliento, una acción a balón parado acabó con el 3-2 para el equipo local, al cabecear Baraja una falta lanzada por Manuel Fernandes. El partido en su tramo final fue muy emocionante, ya que el Betis buscó desesperadamente el empate, pero el Valencia tuvo sus oportunidades, entre ellas una falta lanzada por Villa al larguero.

El equipo andaluz insistió e insistió y provocó un final de infarto, volcado sobre la meta del Valencia, que jugaba con Mata lesionado, pero sin disponer de claras ocasiones de gol para cuanto menos nivelar la contienda.

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