'Del Mundial, quien más me gusta es Kroos. El chico lo hace casi todo bien. Tiene un manejo del balón casi perfecto'. Así habló Johan Cruyff de una de las sensaciones del torneo y que jugará con toda probabilidad en el Real Madrid la próxima temporada. Sus palabras, antes del partido ante Brasil, fueron proféticas. Kroos, una vez más, volvió a deslumbrar.

Con la muerte de Alfredo Di Stéfano se fue uno de los grandes. El argentino aún tuvo tiempo de ver jugar a Kroos, pero, como ha ocurrido con cada fichaje en los últimos años, no podrá recibir al jugador cuando sea presentado oficialmente. Será imposible conocer la opinión de la Saeta Rubia sobre Kroos, pero Cruyff, otro de los mitos del fútbol, se encargó de resaltar la figura de un fichaje que puede ser el mejor del año. Y, además, a buen precio: 25 millones de euros.

La trayectoria del centrocampista alemán a lo largo del Mundial ha dado la razón a Cruyff. No ha ido de menos a más ni de más a menos. Ha hecho lo mejor que podía hacer, mostrar una regularidad pasmosa para un chaval de sólo 24 años. Con esa edad, a otros les habría podido la ansiedad, pero al todavía jugador del Bayern de Múnich no se le ha visto ni rastro de nerviosismo.

Sus estadísticas son reveladoras. Kroos lo ha jugado todo, los 570 minutos que ha necesitado Alemania para llegar a la final. Por el camino, los germanos dejaron a Portugal, Ghana, Estados Unidos, Argelia, Francia y Brasil. Ante todas esas selecciones, los números del centrocampista alemán no engañan.

Su porcentaje de aciertos en los pases es altísimo. El 85'4% de las veces que mueve el balón, acaba en el destino correcto. Además, suma cuatro asistencias y dos goles -consiguiendo el doblete más rápido de la historia en tan solo 69 segundos-, los que marcó a Brasil en el día en el que fue definitivamente entronizado. El peor día de la historia del fútbol brasileño (1-7).  Además, también destaca a la hora de defender y frenar los ataques del rival. Sus 15 recuperaciones de balón le avalan. Y tan solo 4 faltas ha cometido. Solo ayer sus númers se elevaron. Ante la pentacampeona completío 71 pases, con un 93% de acierto. Y además recuperó seis balones.

El propio Kroos es consciente de que gran estado de forma: 'Estoy en un gran estado de ánimo y me siento en forma', dijo ayer a los periodistas tras su exhibición contra Brasil. 'Para mí, personalmente, que fue uno de mis mejores partidos de Alemania', dijo Kroos cuando le preguntaron si era su mejor partido con la selección nacional. También su seleccionador, Joachim Löw, se deshizo en elogios hacia su jugador: 'Las cosas que hace en la cancha siempre conducen a algo. Ha estado ayudando al equipo enormemente en los últimos dos años'.

El equipo de Luiz Filipe Scolari sufrió a una selección que actuó como una apisonadora. Gente como Sami Khedira, Thomas Müller o Miroslav Klose no dejaron títere con cabeza. Pero fue Kroos el más brillante y el más abusón. Su despliegue fue descomunal. Homenajeó a Di Stéfano a su manera. Como el argentino, estuvo en todas las partes del campo. Subió, bajó, llegó hasta el área rival y asistió a sus compañeros. Fue un futbolista total. Por eso, la FIFA le eligió como el MVP del partido. El chico se lo ganó. Y, con permiso, de hombres como Robben, Messi, James Rodríguez o su compañero, Thömas Müller, puede ser nombrado mejor jugador del Mundial.

Por eso, los 25 millones de euros que podría pagar el Real Madrid por su fichaje van a ser baratos. En junio de 2015 acaba contrato con el Bayern de Múnich y los alemanes han tenido que negociar. Esperar un año más, suponía tener cero ingresos por la marcha de un jugador que saldrá de Brasil siendo una figura mundial.

Otros futbolistas que han disputado el Mundial han cambiado de equipo. El croata Ivan Rakitic y el chileno Claudio Bravo se marcharon al Barcelona por 18 y 11'5 millones de euros, respectivamente. El Chelsea pagó por el hispano brasileño Diego Costa 30 y su exequipo, el Atlético de Madrid, está a punto de abonar 21 millones al Bayern por Mandzukic.

Las cifras bailan de un equipo a otro con jugadores mundialistas. Otros esperan irse de sus clubes, como hará el costarricense Keylor Navas, 'condenado' a dejar el Levante. Otro de las sensaciones del torneo, el colombiano James Rodríguez, también se ha puesto en el punto de mira de los grandes de Europa. Entre ellos, el Real Madrid. Sin embargo, el Mónaco no quiere desprenderse de una de sus estrellas y por eso ha pedido unos 80 millones al quiere llevárselo.

Pero, hasta este momento, ninguno alcanza el nivel desplegado por Kroos. Cruyff tenía razón y puede ser el mejor del Mundial. Su opinión fue profética. Antes del choque ante Brasil, dejó claro quién era el mejor para él. Después, Kroos arrasó para agrado del genio holandés y para demostrar que es el mejor fichaje del torneo. Lo tiene todo. Bueno, bonito y barato.