Público
Público

Prohibidas las Ferrari de los pies

La NBA veta unas zapatillas que proporcionan una mejora de nueve centímetros en el salto

ALBERTO CABELLO

El señor Goldston hizo de sus hijos, Adam y Ryan (Nueva York, 1987), dos conejillos de indias en el sector de las zapatillas de baloncesto. Alto Ejecutivo de Reebook, Converse y LA Gear, testó con sus retoños los modelos más novedosos y rompedores de las compañías para las que trabajó. De los patucos pasaron directamente a lucir los más exclusivos productos por los pasillos de la oficina de su padre.

Ahora, muchos años después, los gemelos Goldston se han estrellado con la prohibición de la NBA a las botas que han diseñado a partir de la experiencia adquirida a través de los paseos con esos exclusivos regalos.

La liga de baloncesto profesional anunció ayer que no permitirá el uso de la zapatilla Concept 1 debido a que supuestamente incrementa la capacidad de salto vertical de los deportistas. 'Los jugadores no pueden usar ningún calzado deportivo que proporcione una ventaja competitiva indebida', informó el martes la NBA. Al parecer, ya había bastantes baloncestistas de postín interesados en el invento.

La historia se repite tras un cuarto de siglo. Un 18 de octubre de 1985, la primera versión de las Air Jordan fue vetada por incumplir la norma de que el calzado debía ser blanco en su totalidad; 25 años y un día después, la tecnología es el argumento para sacar las Concept 1 de las taquillas de los jugadores profesionales.

Tras el anuncio, la estrategia de Athletic Propulsion Labs(APL), la empresa de los Goldston, ha sido idéntica a la de Nike a mitad de los ochenta: convertir el producto en un artículo proscrito para avivar el interés en probar lo que otros han prohibido. La web de APL apareció ayer con un sello en la que podía leerse: 'Prohibido por la NBA'.

Por 300 dólares (unos 217 euros), las Concept 1 aseguran a su dueño una mejora en su salto vertical de unos nueve centímetros. Adam y Ryan, antiguos jugadores del equipo de baloncesto de la Universidad de Southern California, siempre estuvieron obsesionados con mejorar esa capacidad. El lema de la empresa es: 'Deja de soñar, salta más alto'. Han creado una nueva ciencia la Jumpology (Saltología).

La zapatilla de la polémica contiene un dispositivo de uretano en la parte delantera de la suela diseñado para capturar la mayor cantidad de energía posible en la fase de carga del salto. Toda esa fuerza luego se libera en la etapa de propulsión, lo que posibilita que el brinco logre mayor altura.

El material del que está hecha la zapatilla es de fibra de carbono. Su diseño está basado en dos coches, el Pagani Zonda y el Koenigsegg CCXR, valorados en más de un millón de dólares. 'Es como llevar un Ferrari en los pies', dicen los Goldston.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?