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Dos zarpazos de Kanouté

Dos goles del delantero africano desmontan la apuesta de Guardiola por los jóvenes

NOELIA ROMÁN

Si los partidos duraran sólo una hora, la apuesta de Pep Guardiola habría salido redonda. Sus chicos, su equipo de circunstancias para iniciar el curso, aguantaron el tipo hasta que el físico dijo basta, soltaron el balón y el Sevilla, muy astuto en su planteamiento, salió de la guarida y dio un par de zarpazos para dejar la Supercopa en franquicia. Impuso Kanouté toda su veteranía, el Sevilla su paciencia y mayor rodaje, y al Barça le tocará certificar en el Camp Nou que las certidumbres de Guardiola siguen vigentes.

Lo fueron durante 60 minutos, el tiempo que los muchachos del filial respondieron con admirable solvencia a la confianza mostrada por el técnico azulgrana y se mezclaron con los veteranos de modo natural, como si entre los unos y los otros no mediara el abismo anunciado por los más alarmistas. Las diferencias son obvias. A Xavi, Iniesta y compañía les ha costado casi una década alcanzar el punto más alto de la cima.

Los canteranos responden al reto del técnico durante una hora

Pero no lo es menos que el sistema es solvente. Que la cadena de montaje ideada por Guardiola funciona desde los primeros eslabones y se engarza con los últimos sin que el proceso chirríe. De modo que, si el técnico decide prescindir de sus ocho internacionales porque están faltos de entrenamiento, en el filial encuentra a cuatro chavales -todos debutantes excepto Dos Santos- capaces de rellenar el hueco sin que el Barça pierda el estilo y la identidad que lo definen. Llevan tanto tiempo ensayándolos que casi nada les extraña.

Miño no es Valdés, pero ayer lo suplió con pocos titubeos y la suficiente entereza como para aguantar el tipo durante toda una hora y ceder sólo ante el implacable estilete de Luis Fabiano. Tampoco Oriol Romeu es Busquets, pero en sus pies se inició la jugada que supuso el primer tanto del Barça y la confirmación de que Ibrahimovic ha decidido responder con goles a sus detractores y a los continuos rumores sobre su traspaso. Cuatro suma el delantero sueco en otros tantos partidos. El de ayer, un toque raso para engañar a Palop por el primer palo, tras un buen centro de Maxwell.

e Ibra contestan a los rumores de traspaso con goles

Lo del brasileño fue otra buena noticia para Guardiola: reconvertido a extremo, se manejó casi mejor que en el lateral, y surtió a Ibrahimovic y a Messi de buenos balones. La Pulga tomó el relevo del sueco, agotado y tocado, cuando el físico tampoco acompañaba ya al Barça, menos rodado que el Sevilla. Sin demasiada mordiente, el equipo de Antonio Álvarez fue cocinando su momento, apoderándose del balón, hasta que Luis Fabiano, como casi siempre, encontró el gol que buscaba y los cambios reanimaron al Sevilla.

Kanouté firmó los dos tantos que voltearon el marcador y colocó al Sevilla en el buen camino para alzar el primer título del curso. Pero queda la vuelta en el Camp Nou y para entonces Guardiola ya contará con sus internacionales. 

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