El Gobierno británico elevará de forma espectacular (del 40% al 50%) los impuestos sobre rentas superiores a 150.000 libras (unos 170.000 euros) en abril de 2010, enmarcando la batalla de las elecciones generales que está previsto que se celebren dos meses después. La subida de la presión fiscal, anunciada ayer por el ministro de Hacienda, Alistair Darling, en la presentación de los Presupuestos Generales, sólo afecta al 2% de la población, pero cumple un doble propósito político: contentar a las filas laboristas y encajonar a la oposición conservadora en el debate sobre fiscalidad.

El partido de David Cameron, líder de los conservadores, es favorito para hacerse con el poder en todos los sondeos de intención de voto.

En su proyecto presupuestario, Darling también castiga a los conductores. Sube el impuesto sobre el carburante el equivalente a 2,4 céntimos de euro por litro a partir del próximo septiembre y lo hará automáticamente por encima de la inflación en años venideros. Un régimen similar, de subidas anuales de la tasa estatal, tuvo que abolirse ante la rebelión de transportistas que paralizó el país durante  el Gobierno de Tony Blair. Pero Darling intentó compensar el malestar del sector automovilista ofreciendo subvenciones de 2.240 euros a los que cambien su vehículo viejo por uno nuevo.

Las medidas de aumento de la presión fiscal anunciadas ayer por el ministro británico tratan de frenar el  intenso desequilibrio, desconocido en la historia reciente, de las cuentas públicas.

Según el presupuesto, el déficit público llegará al 12,4% del PIB en 2009 y apenas mejorará en 2010, ejercicio para el que se estima una tasa del 11,9% del PIB.  Además, la  deuda acumulada, que está actualmente en el 79% del PIB (el doble de los estimado en otoño), no comenzará a reducirse hasta 2015.

Reino Unido sufre la peor recesión desde la II Guerra Mundial, con una tasa de desempleo del 6,7% que aún no ha tocado techo, una inflación negativa y una contracción prevista este año del 3,5% del PIB. “La economía comenzará crecer a final de 2009”, dijo Darling, optimista, en la Cámara de los Comunes. El ministro prometió empleo o prácticas laborales a los menores de 25 años en paro y anunció otras ayudas a la industria ‘verde’ y la construcción de viviendas sociales. El gasto público comenzará a contraerse a partir de 2011.