El gran tijeretazo en las cuentas públicas, como ya se había anunciado, recae sobre la inversión en infraestructuras. La cifra, que incluye lo que comprometen los ministerios de Fomento (el más inversor), el de Medio Ambiente y las empresas de ambos, baja un 31%, en comparación con el presupuesto inicial de 2010, hasta 14.640 millones. Este tipo de inversión ya no es la prioridad, como en las cuentas de 2010, por la obligación de cumplir con los objetivos de rebajar el déficit.

Esta restricción forzosa provoca que el dinero asignado a carreteras caiga un 51%, hasta 2.540 millones. Mientras, lo destinado a ferrocarril, que supone casi la mitad de la inversión, 6.948 millones, se recorta un 21%. Entre los proyectos de alta velocidad se incluye la integración del ferrocarril en Valladolid, León, Palencia, Vitoria, Bilbao e Irún, además de tramos del AVE a País Vasco, Galicia, Asturias, Murcia, Andalucía y Extremadura.

Sin embargo, el proyecto de presupuestos ya adelanta que en 2011 se adjudicarán las primeras concesiones del Plan Extraordinario de Infraestructuras (PEI) dotado con 17.000 millones y con el que Fomento busca compensar la menor inyección de dinero público. El departamento de José Blanco ultima las condiciones de estos contratos de concesiones en los que las constructoras adjudicatarias adelantarán el dinero de las obras a cambio de un canon que el Estado les pagará al año a partir de 2014. En breve, estas obras, empezarán a salir a concurso. En carreteras, habrá nuevos tramos de autovía, entre los que se barajan el que une Murcia y Valencia (A-33), Ourense-Lugo (A-56) o la circunvalación de Pontevedra (A-59).

No obstante, la mayor parte del PEI irá a infraestructuras ferroviarias. Entre autovías y ferrocarril, el presupuesto detalla ya hasta 16 obras (frente a las ocho anunciadas) que podrían entrar en este plan con dinero privado. Entre los proyectos figuran el acceso ferroviario al puerto de Algeciras, el viario y por tren al de Barcelona, el tramo de AVE Sevilla-Huelva y la prolongación de la línea de Cercanías C-5 desde Madrid hasta Illescas. Al margen del PEI.

En el reparto por comunidades de la inversión total, un tercio se queda en Andalucía (el 17,8%) y Catalunya (15,2%). Reciben menos del 3% del total Navarra, La Rioja, País Vasco, Baleares, Cantabria y Canarias (ver gráfico).