Este año, sólo 25 empresas españolas forman parte de las mil europeas que han superado el listón de 4,37 millones de euros de inversión mínima necesaria para entrar en el ranking de las 1.400 empresas del mundo que más invierten en I+D. Y sólo dos de ellas, Santander y Telefónica, forman parte del top 50.

Pero ese análisis es engañoso porque le faltan datos importantes que demuestran que las empresas españolas están bien situadas: 20 están entre las primeras 50 de sus respectivos sectores, y 11 superan el listón de las diez mejores. Y en banca y servicios informáticos, Santander y Amadeus son el número uno de Europa. Además, con respecto al año pasado, el crecimiento en inversión en I+D supera con creces la media europea del 6,1%.

'Refleja la realidad, España tiene empresas líderes en el mundo en sus respectivos sectores, antes no las teníamos', sentencia el secretario general de Innovación, Juan Tomás Hernani.

Este año, los datos de las mil empresas europeas y 400 del resto del mundo que más invierten en I+D, que cada ejercicio elabora la Comisión Europea, parecen hablar por sí solos. En 2009, en pleno fragor de la crisis, la inversión de las 1.400 cayó un 1,9%; su facturación, otro 10,1%; sus beneficios, un 21%, y su empleo, un 1,2%. En 2010, en cambio, el vuelco fue absoluto y rotundo: la inversión subió el 4%; la facturación, un 9,6%; los beneficios, el 46%, y el empleo, otro 3%.

Si se analizan las mil empresas europeas, el fenómeno es el mismo. La inversión pasa de caer un 2,6% en 2009 a un incremento del 5,8% en 2010. La facturación, que había caído un 8%, sube ahora un 11,8%. Los beneficios, desplomados tras una caída del 13%, se disparan y suben el 45,6%. Y el empleo pasa de un 1% negativo a crecer ligeramente, un 0,6%. Lo mismo ocurre si se tienen en cuenta sólo los datos de las primeras 400 empresas europeas del ranking, para que sea comparable con las 400 del resto del mundo. En este caso, las subidas son del 6,1% en inversión, del 13% en facturación, del 46% en beneficios, y del 0,9% en empleo.

¿Cómo puede entenderse entonces que unos resultados tan positivos hayan llevado a la comisaria de Investigación, Innovación y Ciencia, Máire Geoghegan-Quinn, a afirmar que 'nos enfrentamos a una situación de emergencia en la innovación'? La comisaria es contundente: 'No es suficiente. La inversión en Europa ha crecido un 6,1%, pero nuestros competidores han crecido más: EEUU, un 10%, y China, un 29,1%. Necesitamos más innovación y la necesitamos rápido'.