Los gestos y mensajes triunfalistas del Gobierno en torno a los resultados de las políticas de austeridad y la supuesta salida de la crisis levantan ampollas entre los trabajadores que este jueves se han manifestado en las calles de Barcelona.  Decenas de miles de personas han marchado por el centro de la capital catalana, desde la Plaza de Catalunya hasta la Plaza de la Catedral, convocados por UGT y CCOO [VER FOTOGALERÍA].

Los dirigentes sindicales catalanes señalan que el paro sigue siendo el principal problema del país y que la prolongación de esta situación deja a muchísimas personas sin ingresos ni posibilidades de trabajar. 'Por mucho que insistan en vender un panorama de reactivación económica, las trabajadoras y trabajadores no ven ninguna recuperación', ha dicho Joan Carles Gallego, secretario general de Comissions Obreres de Catalunya.  Medio millón de catalanes no recibe subsidio ni prestación alguna y, en cerca de 250.000 hogares, todas las personas en edad de trabajar estan en el paro, la situación laboral de las mujeres sigue empeorando, las personas inmigrantes ven reducidos sus derechos básicos y caen en la exclusión social, señalan UGT y CCOO en un manifiesto común.

'Contra la pobreza laboral y social' es el lema principal de ambas centrales para su convocatoria del Primero de Mayo. PÚBLICO

'Habrá un antes y un despuès de este primero de mayo', ha dicho en declaraciones a Público el secretario general de UGT en Catalunya, Josep Maria Àlvarez, como réplica a las palabras del ministro de Economía, Luis de Guindos, tras el Consejo de Ministros de este miércoles. Los trabajadores, según Àlvarez, hoy se dan cuenta de la fuerza que tienen para hacer frente a la política económica del Gobierno. 'No la cree nadie', ha asegurado. '¿De qué están contentos en el PP?', ha preguntado. '¿De las decenas de miles de jóvenes sin trabajo? ¿De las centenares de miles de familias sin ingresos?'. 'Este primero de mayo marcará un punto de inflexión', ha insistido.

Se trata, según Àlvarez, de exigir la derogación de las reformas laborales, tanto las Rajoy como las de Zapatero, de acabar con los recortes y de exigir la inversión efectiva de los capitales que hoy solo se mueven en la especulación. 'No es verdad que no haya dinero. Hay que repartirlo'. Ha reclamado. Contra la pobreza laboral y social es el lema principal de ambas centrales para su convocatoria de hoy a la movilización.

Trabajadores de Panrico, en la marcha del Primero de Mayo en Barcelona. PÚBLICO.

Joan Carles Gallego, en su discurso ante los manifestantes, ha explicado además que la deriva autoritaria y recentralizadora del Gobierno central es un freno para la salida de la crisis. 'Quieren silenciar la protesta social, atacan el sindicalismo y ponen en cuestión los derechos de huelga y manifestación'. 'La corrupción política se mantiene, la desafección ciudadana crece y la desconfianza en las instituciones también ', ha constatado. Ante esa situación de crisis política e institucional, la respuesta ha de ser, según Gallego, la exigencia de 'más democracia y más derechos'.

Otras cinco manifestaciones han recorrido también las calles de Barcelona en el Día del Trabajo. De éstas, la más numerosa ha sido la convocada por el sindicato CGT, que ha marchado a lo largo de las Ramblas.