MADRID.- ACS profundizará en el proceso de simplificación de la estructura del grupo que viene realizando en los últimos años, con el fin de "abordar con éxito" las oportunidades de crecimiento que surjan, según indicó el presidente de la compañía, Florentino Pérez.

La compañía prevé así ahondar en la reestructuración que aborda, fundamentalmente en la rama de construcción, Dragados, y en sus filiales de construcción alemana Hochtief y australiana Cimic, empresas sobre las que el mercado viene barajando una eventual integración. De esta forma, la reorganización que ACS empendió en 2012 y que tenía previsto culminar este año, podría suponer más tiempo. Su objetivo último es "lograr una estructura más ágil y eficiente, centrada en los negocios estratégicos", según indicó, sugiriendo posibles desinversiones.

El proceso está liderado por Marcelino Fernández Verdes, actual primer ejecutivo de Hochtief y Cimic, quien, una vez termine esta labor, está previsto regrese a Madrid para compartir con Florentino Pérez funciones ejecutivas de ACS en calidad de consejero delegado.

Por el momento, el presidente de la compañía aseguró que "se seguirá simplificando la estructura del grupo, eliminando duplicidades y robusteciendo el capital para afrontar con garantías de éxito los retos de la expansión internacional". "ACS aprovechará las mejores oportunidades que surjan para crecer, aseguró al respecto el presidente de la compañía ante la junta de accionistas.

En este punto, dejó una puerta abierta a eventuales adquisiciones, dado que apuntó tanto a lograr nuevas concesiones de infraestructuras como a abordar "inversiones estratégicas que puedan añadir valor". "Tenemos un potencial de crecimiento rentable y muy atractivo", añadió.

El tercer eje de la actual estrategia de ACS pasa por seguir reduciendo el endeudamiento de 2.624 millones que soportaba a cierre de 2015, pese a haberlo recortarlo ya en 6.700 millones (en un 71%) durante los cuatro últimos años.

Florentino Pérez aseguró que los resultados del grupo de 2015 "ya muestran la efectividad del proceso de transformación, a pesar de un entorno complicado y lleno de incertidumbres.

Para 2016, el presidente de la compañía tan sólo indicó que el beneficio neto de ACS "será superior al de 725 millones de euros logrado en 2015 y mejor que el estimado por el consenso de analistas financieros". No obstante, no indicó si el grupo finalmente cumplirá el objetivo de alcanzar la cota de los 1.000 millones de euros que fijó en la junta celebrada el pasado año.

"En 2016 esperamos continuar creciendo y recogiendo los frutos de un proceso de transformación continuo que mantenemos en toda nuestra organización, buscando maximizar la eficiencia y el servicio al cliente, aprovechando a la vez las mejores oportunidades de inversión que se nos presenten", declaró Florentino Pérez ante los socios del grupo. "Nuestros accionistas participan en un proyecto atractivo, ilusionante y, sobre todo, rentable", garantizó el presidente de ACS.