BARCELONA.- Las dos grandes entidades bancarias de Catalunya, CaixaBank y Banco Sabadell, han negado este viernes que la posible inseguridad jurídica en Catalunya les afecte a su negocio.

El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha negado que la situación política catalana esté afectando a su negocio y se ha mostrado convencido de que, pese a las dificultades, los gobiernos español y catalán serán capaces de llegar a un acuerdo sobre esta cuestión.

"Por difícil que parezca, seguimos confiando en la capacidad de los políticos para que se llegue a una solución", ha dicho Gortázar durante la presentación de los resultados económicos de los nueve primeros meses del año, en los que el banco ha obtenido un beneficio de 996 millones de euros, un 57,3 % más que en 2014. Gortázar ha reiterado que situaciones como la catalana "necesitan diálogo, pactos", y que "una buena solución sólo puede venir por un gran acuerdo entre Cataluña y España".

"No hemos tenido ningún efecto en nuestro negocio y seguimos centrados en lo que tenemos que hacer"

Preguntado sobre si el proceso soberanista ha afectado de alguna manera a la marcha de la entidad, Gortázar ha subrayado: "No hemos tenido ningún efecto en nuestro negocio y seguimos centrados en lo que tenemos que hacer, que es dar el mejor servicio posible a los clientes en Cataluña y España".

El consejero delegado, por otro lado, ha evitado valorar el comunicado que el pasado 18 de septiembre, en plena campaña electoral catalana, hicieron público las patronales bancarias que advertía de riesgos para la estabilidad financiera ante cualquier decisión política que quebrantara la legalidad vigente y conllevara la exclusión de una parte de España de la Unión Europea y del euro, con lo que una hipotética segregación de Cataluña obligaría a la banca con presencia en la zona a "reconsiderar" su estrategia de implantación.

"Prefiero no hacer especulaciones sobre situaciones hipotéticas", ha señalado Gortázar, que ha incidido en que el objetivo de CaixaBank es "ser el mejor banco en calidad y confianza de los clientes" en territorio español. Asimismo, ha recordado: "La situación catalana, como hemos venido diciendo de manera insistente, necesita diálogo, acuerdo y pacto". "Es una declaración que hicieron las patronales y no me corresponde hacer una declaración. Ahora hay que mirar adelante y poco más puedo añadir sobre el tema", ha manifestado. 

Por su parte, el consejero delegado de Banco Sabadell, Jaume Guardiola, ha afirmado este viernes que la entidad se adaptará "a la realidad que exista" en Cataluña, igual que lo hace en todos los mercados en los que opera, como Reino Unido, Estados Unidos y Latinoamérica.

Preguntado por cómo ve el banco el escenario tras las elecciones catalanas del 27 de septiembre, en la rueda de prensa de presentación de resultados del tercer trimestre, ha insistido en que la clase política tiene "la obligación de hablar lo más posible y llegar a los máximos consensos". 

De todas formas, ha agregado: "En Banco Sabadell estamos muy lejos de que ese ambiente de inseguridad jurídica se pueda producir y seguimos con el negocio como siempre". Así, ha descartado afectación en el negocio por aquel comunicado, ya que el banco ha crecido en recursos en balance: "Todo lo que está pasando genera en los clientes todo tipo de reacciones, y tratamos de entenderles a todos con profesionalidad, dando explicaciones cuando un cliente las pide".