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España destruyó empleo durante el Gobierno de Mariano Rajoy

Pese al triunfalismo del Gobierno y al descenso del paro, la situación del mercado laboral español ha ido a peor entre 2011 y 2015. Te lo contamos en siete claves.

Cola de parados esperan para entrar en una oficina del Servicio Público de Empleo de la Comunidad de Madrid. REUTERS/Andrea Comas

JORGE OTERO

Madrid.— El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aprovechó este jueves los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondientes al último trimestre de 2015, con 678.200 desempleados menos en 2015,  para sacar pecho y, de paso, colocar una vez más su mensaje de que "España necesita estabilidad".

Rajoy vino a decir que el país necesita otro Gobierno del PP. El ministro de Economía, Luis De Guindos, se apuntó al triunfalismo y aseguró que los datos de la EPA "superan las expectativas que teníamos". 

Ante tamaña muestra de optimismo, cabe preguntarse si la situación actual es tan buena, sobre todo cuando estos últimos datos de la EPA permiten hacer ya un balance general de lo que ha sido la legislatura de Mariano Rajoy en términos de empleo. 

Una mirada en perspectiva a estos últimos cuatro años revela que la evolución del empleo en España no ha sido tan buena como dicen desde el PP. Hay varias claves que dibujan una realidad mucho menos idílica.

1. España destruyó empleo entre 2011 y 2015...

Esta no ha sido la legislatura del empleo; ni tan siquiera el paro se redujo a la mitad, tal como afirmó Rajoy en 2010 que ocurriría si él gobernaba. Muy al contrario, los cuatro años del líder del PP en el palacio de la Moncloa se han saldado con un absoluto fracaso: en diciembre de 2015 había 58.800 ocupados menos que en el mismo mes de 2011. Es decir, ahora hay menos gente trabajando que la que había cuando el PP llegó al poder. 

Es cierto que en en los dos últimos años, 2015 y 2014, se creó empleo, pero fue mucho más lo que se destruyó en los dos primeros años de la legislatura, en 2012 y 2013. En 2012, el primer año de Rajoy al frente del Gobierno, se destruyeron 813.600 empleos. Pese a ser algo mejor, en 2013 se siguió destruyendo empleo, en concreto 204.200. En total 1.017.800 empleos destruidos en la primera mitad de la legislatura. Los empleos que se crearon en 2014 —433.900— y en 2015 —525.100— suman 959.000, una cifra insuficiente y que aún no compensa la de empleos destruidos en los dos años anteriores. Y no digamos ya desde el inicio de la crisis, allá por 2008.

2. ...Pese a que el paro bajó en 507.800 personas

Es cierto que el paro ha descendido en 507.800 personas entre 2011 y 2015. Mucha gente se preguntará entonces cómo es posible que no haya más empleo en España si ha bajado el número de parados. La explicación hay que buscarla en la población activa, que suma el número de ocupados y el número de parados. En los últimos cuatro años la población activa ha bajado en 566.000 personas, pero el paro —ya se dicho— sólo lo ha hecho en 507.800. La diferencia entre ambas cifras es de 58.800 personas, justo el número de empleos que se ha destruido. 

3. No todos los que dejan de estar parados encuentran un trabajo

Los datos de la EPA revelan que 2014 terminó con 477.900 parados menos y 2015 con 678.200. En total, 1.156.100 personas parados menos. Pero sólo 959.000 encontraron un empleo. El resto, 196.900 personas, o bien tuvieron que buscarse la vida fuera de España o bien desistieron de buscar un trabajo ante las nulas posibilidades de encontrarlo. 

4. Una tasa media siempre por encima del 21%

La tasa de paro superó la dramática cifra del 20% en el último trimestre de 2010.  Cinco años después y una legislatura entera con Rajoy como presidente, el país ha sido incapaz de bajar de ese umbral tan simbólico. De hecho, en el último trimestre de 2015 dicha tasa aún permanecía en el 20,9%. La tasa media del año, sin embargo, aún fue más alta: el 22,05%. En 2011, el último año que gobernó Zapatero, la tasa media fue del 21,39%. En 2013 alcanzó su pico: un 26,09%, y a partir de entonces empezó a bajar. Datos que dejan en mal lugar a Rajoy.

5.Un empleo de baja calidad

Pero hay otro dato que deja en peor lugar al Ejecutivo del PP. El empleo que se ha creado en los dos últimos años, y del que tanto presume el PP, ha sido en general de baja calidad: ha crecido la temporalidad y hay menos gente trabajando a tiempo completo. No hay más que mirar la EPA y comparar el año 2011 con el de 2015 para darse cuenta de ello. En cuanto a la temporalidad, 2015 terminó con 251.000 trabajadores indefinidos menos que en 2011, mientras que el número de temporales aumentó en 89.300 en el tiempo que Rajoy ha estado en la Moncloa.

La EPA deja también otro dato demoledor: en 2011 había 15.250.500 personas trabajando a tiempo completo; en 2015 eran 450.000 personas menos las que trabajaban toda la jornada. Este dato, tiene una derivada: el empleo a tiempo parcial ha crecido también, pasando de 2.452.000 personas en 2011 a 2.843.700 en 2015. 

6. Crece el paro de larga duración

Una de las situaciones más dramáticas del paro es no poder escapar de él. El número de parados de larga duración, aquellos que llevan un año o más sin empleo, ha aumentado de forma importante, especialmente en el colectivo que lleva dos años o más sin trabajo, y que por lo tanto han perdido el derecho a la prestación, una prestación que no ha hecho más que menguar con Rajoy. En 2011 había 1.431.000 parados que llevaban dos años sin empleo; en 2015 esa cifra rozaba los 2.100.000. En cuanto a los que llevaban un año sin trabajo, en 2011 era 761.400 y en 2015 1.212.000. 

7. El paro juvenil sigue siendo una losa

El futuro es de los jóvenes, dice el tópico. En la España actual eso está por ver: con una tasa de paro juvenil del 46,24% es difícil poder entrever ese futuro. Los jóvenes son el colectivo más afectado por la crisis. Quienes más negro lo tienen son los más jóvenes entre los jóvenes: la tasa de paro entre los que tienen 16 y 19 años alcanza un escalofriante 66,06%, pero a Rajoy le queda el consuelo de que en 2011 la situación era aún peor pues la tasa de desempleo juvenil estaba en el 48,5%, aunque llegó a superar de largo el 50% en 2012, 2013 y parte de 2014. 

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