MADRID.- Banco Popular someterá al voto de los accionistas en una junta extraordinaria en febrero su propuesta de nombrar a Emilio Saracho como nuevo presidente de la entidad en sustitución de Ángel Ron. La decisión se acordó de manera unánime en el consejo de administración del banco, lo que podría poner fin a las recientes especulaciones en la prensa sobre la división en el seno de la entidad respecto al recambio en su cúpula.

Popular, considerado como el eslabón débil del sector bancario español, anunció el 1 de diciembre su intención de reemplazar a Ron por Emilio Saracho después de que los accionistas se rebelaran tras la abrupta caída del valor motivada, entre otras cosas, por los problemas derivados de su exposición al mercado inmobiliario.

Ron había sostenido durante mucho tiempo que Popular tenía la fortaleza necesaria para mantener su independencia. Banqueros y analistas dicen que su destitución podría señalar a la entidad como objetivo de adquisición y desencadenar otra fase de consolidación en un sector que ha visto como el número de entidades pasaba de 55 a 14 desde el inicio de la crisis financiera.

Con el relevo de Ron se intentaba poner fin a la lucha interna que se vivía en el seno del banco entre Ron y sus afines y los consejeros contrarios a su gestión, entre los que se encontrarían la consejera coordinadora, Reyes Calderón, y el grupo de accionistas encabezados por el mexicano Antonio del Valle.

La pérdida de valor de Popular y el intento frustrado de fusión con Sabadell estarían en el origen de estas disputas. Hasta que la junta de accionistas ratifique el nombramiento de Saracho, Ángel Ron continuará como presidente del banco.

Aunque la situación no está normalizada y han de pasar meses hasta que Ron abandone la entidad, lo cierto es que desde que se anunció el desembarco de Saracho en el banco los títulos de Popular han recuperado un 15,35% de su valor en Bolsa, aprovechando, entre otras cosas, el 'rally' de fin de año.