MADRID.- "Conformistas" y no diseñados para "mirar a las necesidades de las personas". Así han calificado los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, los próximos Presupuestos Generales del Estado para 2016 después de la reunión que han mantenido con el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro.

Un encuentro del que los líderes sindicales han salido con una percepción positiva: el salario de los empleados públicos aumentará menos que la subida pactada para el sector privado. Todo apunta, ha asegurado, a que los PGE para 2016 contemplan por primera vez desde la crisis una subida de sueldo para los empleados públicos, pero será del 1%, mientras que el III Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) estableció un aumento del 1,5% en la empresa privada.

En este sentido, Méndez ha recordado que los empleados públicos no sólo han tenido una perdida de 9,2 puntos de poder adquisitivo en los cuatro años de congelación salarial. Además, han visto congeladas las aportaciones a los planes de pensiones, un aumento de las horas de trabajo, la reducción de los días de libre disponibilidad, una reposición débil de las vacantes o la destrucción de plazas.

Para Toxo y Méndez, éstos Presupuestos se centran en el aprovechamiento de los márgenes para reducir impuestos, el rigor en el gasto y la mejora de los salarios por el efecto de la bajada de IRPF.

Orientados a reducir el déficit "en exclusiva"

A juicio de los sindicatos, los presupuestos deberían buscar la lucha contra el desempleo y contra la corrupción, pero han observado que sin embargo "están orientados a la reducción del déficit prácticamente en exclusiva".

"Son unos presupuestos conformistas", ya que en su opinión, contemplan una creación de empleo muy escasa teniendo en cuenta la elevada tasa de paro.

Echan en falta un mayor incremento de los ingresos vía lucha contra el fraude o con más impuestos

Méndez ha explicado que estos Presupuestos deberían buscar la autonomía económica del país, que hasta ahora esta sustentada en factores externos, como el cambio euro-dólar, el precio del petróleo y la política del Banco Central Europeo.

Asimismo, echa en falta un mayor incremento de los ingresos vía lucha contra el fraude o con más impuestos y ha recordado que en España la recaudación fiscal per capita se ha desplomado entre 2007 y 2013, hasta ser el país de la zona euro con un nivel más bajo.

Los sindicatos han aprovechado el encuentro para pedir a Montoro que aumente los ingresos de la Seguridad Social con un incremento de las cotizaciones empresariales, porque "está sometida a tal presión que el sistema público de pensiones se va a resentir seriamente".

Aunque el empleo que se genera da apariencia de crecimiento, ha dicho Toxo, se trata de "un reparto del trabajo con modalidades de contratación precaria y una tarifa plana que en su conjunto debilitan los ingresos de la Seguridad Social, lo que hace que se tenga que "tirar de los recursos del Fondo de Reserva".

"Con esta técnica en el diseño de los Presupuestos a las puertas de unas elecciones generales, le están elaborando el programa electoral al resto de los partidos", ha dicho Toxo.

Los agentes sociales consideran que "España ha contraído una deuda social tremenda y tiene que comenzar a solucionarla, por lo que han apostado por un incremento de inversión pública, mejora de las infraestructuras, atención a la familia, a la dependencia, a los mayores, y mejor sanidad, educación, servicios públicos y sociales.

Ambos líderes sindicales han coincidido en que estos Presupuestos deberían hacer una apuesta decidida contra la pobreza, con un plan de choque para crear empleo de calidad, la cualificación de parados de larga duración, la revisión del sistema de protección por desempleo y la creación de una renta mínima de supervivencia.