Pese a la Fiscalía y pese a que la querella del llamado caso Guantánamo correspondió por reparto al Juzgado Central de Instrucción número 6, Baltasar Garzón investigará las torturas cometidas por 'el ejército norteamericano o la inteligencia militar' en la citada base estadounidense o en cualquier otro centro de detención.

El juez afirma en su resolución que 'se ha revelado ahora lo que antes se intuía: [existía] un plan autorizado y sistemático de tortura y malos tratos sobre personas privadas de libertad sin cargo alguno y sin los elementales derechos de todo detenido'. Por eso, gracias a los documentos desclasificados por la Administración norteamericana, que 'deberán solicitarse', Garzón abrió el lunes las diligencias hechas públicas ayer con las que pretende investigar a los responsables de los delitos contra las personas o bienes protegidos en caso de conflicto armado que se propone investigar.

Menciona como dichos responsables a 'los ejecutores materiales o intelectuales, las personas que tuvieran bajo su guarda y custodia a los detenidos y las que autorizaron o practicaron' las torturas cometidas sobre cuatro ex presos de Guantánamo a los que Garzón reclamó por integración en la organización terrorista Al Qaeda y que, en estas diligencias, son las víctimas.

Garzón precisa que las personas que investigará son 'miembros todos ellos del ejército norteamericano o de la inteligencia militar', así como los que 'ejecutaron y/o diseñaron un plan sistemático de torturas o malos tratos, inhumanos y degradantes en contra de los prisioneros que tenían bajo su custodia y que habrían sido capturados en el marco del conflicto armado declarado en Afganistán y a los que se acusaba de terrorismo'.

Y esta parte de la resolución hila perfectamente con la querella presentada por la Asociación Pro Dignidad de los Presos y Presas de España contra seis asesores de Bush que justificaron legalmente estas prácticas. La Fiscalía pidió a Garzón que la enviara al Juzgado Central de Instrucción número 2, que investiga los vuelos de la CIA, para que su titular, Ismael Moreno, la rechazara. La querella correspondió por reparto al juez Eloy Velasco, que aún no se ha pronunciado sobre si la admite o rechaza, pero al que el equipo de abogados españoles que trabaja en el caso tiene ya previsto pedir que devuelva a Garzón.

El titular del Juzgado Central número 5 también aprovecha su resolución para pedirle al juez Moreno que le envíe todo lo que tenga sobre torturas y malos tratos en el causa que investiga desde 2006. El propio Garzón adelantaba en una providencia que 'no le constaba' que investigara esos delitos, pero aún así pregunta a su compañero del Juzgado número 2 'si tiene interés en plantear cuestión de competencia'.

La resolución describe con detalle las torturas denunciadas por Hamed Abderraman Ahmed, alias Hmido y el talibán español, al que el Tribunal Supremo absolvió del delito de integración en Al Qaeda por el que le condenó la Audiencia; Ikassrien Lahcen, absuelto; Jamiel Abdul Latiff Al Banna, que ya ha solicitado su personación en la causa abierta por Garzón; y Omar Deghayes. El juez renunció a la entrega de ambos por su estado de salud.