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Un ex concejal del PP: "Yo soy adicto a la droga y no al sexo"

Javier Rodrigo de Santos aclara que no utilizó la tarjeta de la empresa pública para la que trabajaba en prostíbulos, sino 'para superar el mono de cocaína'

AGENCIAS

El ex concejal de urbanismo del PP en el Ayuntamiento de Palma, Javier Rodrigo de Santos, ha declarado que el gasto realizado con la tarjeta de crédito de la empresa pública de la que era presidente, Empresa Municipal de Obras y Proyectos Urbanos (EMOP), 50.804 euros, lo destinó a la compra de droga debida a su adicción y no al pago de sexo.

El ex concejal culpa de todo a las drogas y asegura estar muy arrepentido. Se enfrenta en su primer juicio a 5 años de cárcel y 9 de inhabilitación, por malversación de caudales públicos durante sus años como edil de urbanismo. 

'En este juicio se ha querido dar una imagen falsa de mí. (...) Yo soy adicto a la droga y no al sexo', ha asegurado De Santos en respuesta a preguntas de la Fiscalía durante la declaración que ha iniciado esta tarde ante el tribunal del jurado, por la utilización ilícita de la citada tarjeta de la Empresa Municipal de Obras Públicas (EMOP) entre 2005 y 2007 para presuntos pagos en clubes de alterne de Palma.

El encausado recordó que fue en 2002 cuando entró en una discoteca del Paseo Marítimo en la que conoció a Alfredo Gómez, propietario del local de alterne masculino Casa Alfredo, donde según la Fiscalía abonó más de 28.400 euros, pese a que manifestó que acudía allí 'porque me proporcionaban droga, lo que me proporcionaba una adicción de la que no podía salir', al tiempo que aseveró que con el dinero 'pagaba además los servicios del local' ya que la cocaína que le proveían le generaban 'necesidades de sexo y la cocaína te produce deshinibición'.

'Allí tenía una privacidad y se me ocurrió como sitio más discreto'

Afirmó asimismo que nunca pensó comprar la droga en locales que no fueran Casa Alfredo, ya que pensaba que 'allí tenía una privacidad y se me ocurrió como sitio más discreto'. 'Para mí era imposible ir a otros sitios por ser un personaje público', agregó al respecto.

'Estaba tan mal que le daba mi cartera entera y yo ni sabía qué tarjeta usaban'

De Santos ha alegado que el gasto se produjo en esos locales en los que se ofrecía sexo porque era su única forma de conseguir la 'intimidad' que un cargo público como él necesitaba para proveerse de la droga necesaria 'para superar el mono', aunque ha añadido que no puede negar que en dichos establecimientos 'se ejercía sexo'.

El que fue teniente de alcalde del Ayuntamiento de Palma ha insistido en que en el momento de los hechos él sufría una fuerte adicción a la cocaína y que sí abonó la droga con cargo a la tarjeta del Consistorio.

'En ocasiones estaba tan mal que le daba mi cartera entera y yo ni sabía qué tarjeta usaban', ha aducido.

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