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A Coruña suspende el uso del mosquito antibotellón

El aparato de ultrasonidos agudos afecta sólo al sistema auditivo de los jóvenes

ERIK LÓPEZ

El Ayuntamiento de A Coruña y el proyecto Escoitar.org suspendieron ayer la colocación de un mosquito un aparato de ultrasonidos diseñado para dispersar concentraciones juveniles en los jardines de Méndez Núñez. Se trata de la zona de la ciudad donde habitualmente los jóvenes se concentran para realizar botellones.

Una responsable municipal admitió que no se activará este dispositivo 'por toda la alarma social que se ha creado'. Aun así, se mostró 'satisfecha', ya que la iniciativa 'pretendía crear un debate social sobre esta tecnología y se ha conseguido'.

El mosquito es un aparato electrónico con el tamaño de un pequeño altavoz (11 x 10 cm) que emite un zumbido a 17,4 kHz, una frecuencia que sólo puede ser escuchada por los menores de 25 años. Esto se debe a un fenómeno natural conocido como presbiacusia, por el que el pabellón auditivo se arruga y deja de percibir las frecuencias más agudas.

Desde el Consistorio coruñés explican que el uso de este mosquito formaba parte de Outonarte 09, una serie de exposiciones y talleres que incluía este sistema de control social mediante la acústica. 'Lo interesante de esta acción era reproducir lo que ya se está viviendo en Reino Unido. Estaba planeado poner en marcha este dispositivo en lugares con una alta concentración juvenil y después informar a los afectados y recoger sus impresiones', según indicaron fuentes municipales.

Esta performance artística 'perseguía sorprender', aseguran los organizadores. 'Debido a la información dada por algunos medios de comunicación ya no había sorpresa, por lo tanto no había arte y la controversia ya estaba creada', explicaron desde Outonarte. En cualquier caso, habilitaron un espacio en la sala de exposiciones para todo aquel que quisiera experimentar las 'molestias' producidas por el polémico dispositivo.

Estos aparatos ya han sido prohibidos en Irlanda, Francia y Bélgica porque 'vulneran los derechos humanos' y 'deberían ser clasificados como un arma acústica', denuncia en su blog la responsable de la iniciativa, Chiu Longina.

Reino Unido cuenta con 3.500 de estos dispositivos y se desconoce si en España algún particular ha puesto en marcha algún mosquito. No obstante, 'el aparato se vende en varias webs e incluso existen distribuidores para España, por lo que cualquier persona con una tarjeta de crédito y acceso a Internet puede hacerse con él', explica Longina.

España carece de legislación al respecto, por lo que puede hacerse uso de él con la única condición de que el sonido no supere los 95 decibelios, que es el límite legal.

 

Los botellódromos (recintos habilitados para que los jóvenes se reúnan a practicar el botellón) 'agravan aún más el problema' del alcoholismo juvenil, debido a la necesidad de acudir hasta allí en coche y a la ausencia de control y vigilancia en estas áreas.

La conclusión se desprende del Libro Blanco del Consumo Responsable de Alcohol en España, difundido ayer. El documento también señala que la permisividad de los padres y el consumo abusivo de alcohol por parte de los mismos, así como la frecuencia y duración de las salidas nocturnas en fin de semana, son las variables más relacionadas con el consumo de alcohol en menores.

El informe subraya que el consumo abusivo de bebidas alcohólicas 'sigue siendo un problema' y denuncia el fácil acceso al alcohol por parte de los menores de edad, informa Efe.

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