'La gente va a la cola del paro porque lo necesita, no porque no tenga otra cosa que hacer'. Esta declaración que ha realizado hoy Mariano Rajoy, con el componente de obviedad que debería tener, coincide con la polémica que suscitó hace una semanas el vídeo que grabó para criticar al Gobierno, personándose en unas oficinas del INEM para ponerse en la cola del paro con el resto de desempleados.

Se estaba refiriendo el líder del PP a las polémicas declaraciones de ayer del consejero de Empleo de Andalucía, Antonio Fernández, quien aseguró que las listas del paro están ficticiamente engrosadas por 'solidaridad familiar'. El consejero aludió a que cuando el principal sustentador de la economía familiar pierde el empleo, también se apuntan a las oficinas de empleo los otros miembros de la casa que antes no trabajaban para intentar conseguir un empleo.

En una entrevista concedida a los informativos de Tele Cinco, Rajoy se ha mostrado  dispuesto a seguir agitando el debate de la cadena perpetua. Ha anunciado que pedirá la reforma del Código Penal en el Congreso de los diputados para incluirla, de 'forma revisable'; una pena que, según resaltó, existe en 'la mayoría de países de la Unión Europea'.

Del mismo modo aseguró que su formación va a plantear la modificación de la Ley del Menor para que los jóvenes que han delinquido ingresen en prisión cuando cumplan los 18 años y de esta forma, dijo, 'se eviten muchos acontecimientos desgraciados' que se han visto.

Rajoy sigue preocupado por la salud del castellano. Aseguró que en la propuesta de pacto de Estado que el ministro de Educación ha trasladado a las comunidades autónomas se echan en falta 'cuatro o cinco' cuestiones fundamentales, como una mayor defensa de la enseñanza en castellano y la libertad de elección de los padres.

También echa en falta un estatuto nacional del profesorado que el PP considera prioritario para garantizar un nivel de docencia similar en toda España y para permitir la movilidad laboral de los profesores entre comunidades autónomas.

Rajoy ha hecho un repaso a la actualidad política, con un denominador común para sus conclusiones: 'Zapatero no hace nada'.

A esta supuesta falta de actividad del presidente del Gobierno, ha achacado cuestiones tan dispares como la crisis económica, la polémica de la ubicación del almacén nuclear o el reparto del agua de los ríos españoles.

'Este es un país ingobernable por culpa de la parálisis del Gobierno', ha dicho. 'Cuando no se toman medidas, aparecen problemas como que los municipios pugnan por un almacen núclear o por el agua. El mejor ejemplo es también la situación económica'.

Una de sus principales críticas es 'la parálisis del Gobierno', sin embargo Mariano Rajoy no se ha mostrado excesivamente activo ante las cuestiones que afectan al Partido Popular.

Cuestionado por lo justo o no de las sanciones de un año que el PP ha impuesto al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, y al ex secretario general del PP valenciano Ricardo Costa, Rajoy ha mirado para otra parte: 'Eso no es competencia mía, esa decisión le corresponde al Comité de Derechos y Garantías del partido'.

Ante las discrepancias que algunos alcaldes del PP están teniendo con María Dolores de Cospedal en Castilla la Mancha por solicitar que se coloque el cementerio nuclear en sus términos municipales, Rajoy tampoco tiene opinión formada: 'Esas son cuestiones que deberán decidir allí'.

Pero respecto al Gobierno tiene clara una cuestión: 'No hacer nada, acaba generando problemas'.