Los socialistas madrileños pedirán al juez Antonio Pedreira que impute al vicepresidente de Madrid, Ignacio González, en el caso Gürtel por los presuntos delitos de prevaricación y malversación. Fuentes oficiales del PSM confirmaron ayer a Público que el nombre de Ignacio González se sumará al de los 45 altos cargos para los que se reclamará la imputación, como anunció el miércoles el líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez. A todos ellos les une un nexo: haber firmado pagos para empresas de la trama Gürtel, pagos en apariencia diferentes pero que, en realidad, escondían contratos fraccionados, aquellos que se adjudican a dedo.

Este diario intentó anoche sin éxito recabar la opinión de la Comunidad de Madrid. Las fuentes consultadas declinaron pronunciarse en tanto el PSOE no haga efectiva su petición. El Gobierno de Aguirre otorgó más de 300 contratos a cuatro empresas de la red Gürtel, lo que les reportó tres millones de euros.

El 29 de diciembre de 2004, el vicepresidente de Madrid firmó, de su puño y letra, la aprobación de dos pagos de 12.000 euros cada uno a Easy Concept, una de las compañías de bandera Gürtel que operaron con la Comunidad de Madrid hasta 2008. La primera factura reflejaba los derechos económicos generados por la 'decoración floral' de la sede de la Presidencia de Madrid para la celebración del aniversario de la Constitución. La segunda factura fue emitida en concepto de 'iluminación y sonorización' del patio de la sede presidencial. La memoria explicativa que acompañaba ambas facturas precisaba que se trataba de un solo acto oficial. El fraccionamiento evitaba que el importe del gasto superase los 12.000 euros y hubiese, así, que convocar concurso o procedimiento negociado.

Ayer, Ignacio González defendió de nuevo la legalidad de los contratos. El Ejecutivo madrileño, dijo, no se arrepiente de haber contratado con las empresas de la Gürtel porque 'estaban capacitadas perfectamente' para hacer sus actividades y 'no había ninguna causa' que les impidiera hacerlo.