Público
Público

Cae la banda de los 100 robos

La Guardia Civil desmantela un grupo de albaneses especializado en asaltos a viviendas y naves industriales

ÓSCAR LÓPEZ-FONSECA

Volvían de 'trabajar' cuando la Guardia Civil los detuvo. Agentes de los Equipos contra el Crimen Organizado (ECO) del Instituto armado han detenido en Alicante a los cinco presuntos integrantes, todo ellos de nacionalidad albanesa, de una banda especializada en el robo con fuerza en naves industriales y viviendas por el método del butrón (practicar un agujero en una pared para acceder al interior).

Su arresto ha permitido aclarar por el momento una veintena de asaltos, aunque los investigadores sospechan que pueden estar relacionados con un centenar de delitos cometidos en las provincias de Alicante, Murcia, Almería y Granada.

Los detenidos pueden estar relacionados con un centenar de delito

La operación Sapo se inició a finales del pasado año, al tener conocimiento la Guardia Civil de la existencia de un grupo organizado especializado en este tipo de robos.

Las pesquisas llevaron hasta unas urbanizaciones de las localidades alicantinas de Torrevieja y Orihuela. Allí, los ahora detenidos habían montado su base de operaciones bajo la pantalla de ser trabajadores nocturnos de empresas de la comarca para no despertar las sospechas de sus vecinos por sus horarios.

Identidades falsas

Sin embargo, su verdadero trabajo comenzaba todas las mañana en un bar cercano a sus domicilios, donde se reunían para desplazarse después a polígonos industriales de todo el arco mediterráneo y comenzar las labores de reconocimiento de posibles objetivos. Para ello, se desplazaban en vehículos que alquilaban con identidades falsas.

Una vez fijaban el objetivo, los delincuentes estudiaban las medidas de seguridad

Una vez fijaban el objetivo, los delincuentes estudiaban las medidas de seguridad, las posibles vías de escape por si eran sorprendidos y el grosor de las paredes donde pensaban realizar el butrón.

Una vez hecho, regresaban a sus domicilios a la espera de que cayera la noche. Entonces, iban a varios descampados próximos a su lugar de residencia lugares donde habían practicado varios zulos para esconder la ropa oscura y el material que iban a utilizar en el robo. Con todo ello, se dirigían a realizar el asalto.

Tras dar el golpe, regresaban ya de madrugada, pasando previamente de nuevo por los zulos donde depositaban el material y el botín obtenido en los robos cometidos. Al cabo de unos días retiraban, de los escondites el botín para venderlo a través de peritos, enviando parte de los beneficios a su país de origen mediante empresas de paquetería.

Así, hasta que la semana pasada la Guardia Civil los detuvo en una carretera comarcal próxima a Torrevieja (Alicante), cuando regresaban de efectuar uno de los reconocimientos previos al robo.

Además, han sido detenidas otras cuatro personas por colaborar con la banda. Tres eran mujeres, que se encargaban de dar cobertura a la banda. Ellas alquilaban las viviendas donde residían, compraban los teléfonos móviles que utilizaban y se encargaban de hacer los envíos de dinero a sus países. También realizaban las contravigilancias para detectar la presencia policial cuando salían o regresaban de dar un golpe.

El cuatro colaborador detenido es el empleado de una empresa de alquiler de vehículos que les facilitaba éstos sin necesidad de que facilitaran sus identidades verdaderas. Los cinco integrantes de la banda cuentan con más de cien antecedentes policiales y judiciales.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias