El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha abogado hoy por que los socios europeos aceleren las reformas estructurales para hacer frente a la crisis y generar confianza en el presente y una economía sólida y competitiva en el futuro.

Zapatero ha lanzado este mensaje en su intervención en el Congreso ante el pleno de la Cosac, el órgano parlamentario especializado en asuntos europeos que se va a reunir durante dos días en Madrid en el marco de la presidencia española de turno.

El jefe del Ejecutivo ha asegurado que los países europeos deben acelerar sus procesos de consolidación fiscal con el objetivo de garantizar la estabilidad presupuestaria en el medio plazo.

Sin referirse de forma expresa a las reformas previstas en España, como la del mercado laboral, Zapatero ha opinado que agilizar las reformas estructurales 'ayudará a generar confianza y a mejorar el potencial de crecimiento económico'.

Zapatero ha insistido en la importancia de reforzar el euro y la coordinación de las políticas económicas entre los países miembros, a la vista de la experiencia del caso de Grecia.

En este punto, ha anunciado que el grupo de trabajo encabezado por el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, está preparando medidas concretas para reforzar el gobierno económico de la eurozona, que estarán listas en los próximos meses.

También ha asegurado que existe un acuerdo para fortalecer 'tanto el brazo preventivo como el correctivo' del Pacto de Estabilidad y Crecimiento y en crear un marco sólido para gestionar las crisis.

Este pacto obligará a los socios europeos a reducir su déficit al 3% en 2013. El déficit de España en 2009 se situó en el 11,2%, mientras que el de la zona euro fue de 6,3%.

Zapatero ha destacado al mismo tiempo la importancia de mejorar la regulación del sistema financiero en Europa y de que el G-20 agilice sus decisiones sobre esta materia para ponerlas en práctica.

Otra de las medidas que se está ultimando en el seno de la UE es el diseño del Consejo Europeo de Riesgo Sistémico y de las Autoridades de Supervisión Europeas para la banca, los seguros y los mercados bursátiles, ha dicho Zapatero.

Este órgano regulará, entre otras cuestiones, las agencias de calificación crediticia en toda la UE.

Zapatero ha añadido que se está avanzando en el análisis de la implicación del sistema financiero en los costes de la crisis, cuestión sobre la que Europa hará una propuesta conjunta en la cumbre del G-20 en Toronto (Canadá) a finales de junio.

El Consejo Europeo de mediados de junio con el que se cerrará la presidencia española de turno debe aprobar las bases de la Estrategia 2020, que definirá el modelo de crecimiento económico en la UE en esta década.

El presidente del Congreso, José Bono, que ha presentado el acto, ha pedido ante los europarlamentarios que eviten que la UE 'se convierta en una maquina gigantesca de burocracia'.

En este sentido, ha apuntado que 'los porcentajes de abstención en las elecciones europeas son un mensaje claro que no podemos dejar pasar por alto una y otra vez'.

Según Bono, cada vez que se celebran elecciones a la Eurocámara, los miembros de la Comisión y el Consejo tienen 'menos nervios e inquietud' por el resultado que cualquier otro gobierno nacional ante sus propias elecciones, y ello no es porque 'no tengan poder' sino 'porque están más alejados, y los ciudadanos lo saben'.

José Bono ha hecho hincapié en que ante la 'complejidad de los procedimientos decisorios' en el seno de la UE existe el riesgo de 'convertir nuestro proyecto común en un colosal complejo adminisrativos', y por ello ha insistido en que la obligación 'primera' de sus instituciones es 'ser eficaz' y 'rendir cuentas'.

Ha mantenido el presidente del Congreso que además estas obligaciones son ahora mayores porque 'vivimos tiempos difíciles' y ha recordado que los ciudadanos piden eficacia y son 'quienes pagan todos los gastos, incluidos nuestros sueldos'.

'Mantener la confianza exige preferir el resultado al discurso, la eficacia a la burocracia y el rigor al papeleo', ha enfatizado