'Cuando van mal, militancia pura y dura'. Felipe González reconoció esta tarde, durante el acto conmemorativo del centenario del grupo socialista, que cuando el PSOE y España atraviesan momentos negativos le resulta más dificultoso alejarse de la primera línea política. 'Cuando el partido y el país van bien, me cuesta menos trabajo tomar distancia'.

González quiso así dejar claro que, en época de vacas flacas, se siente 'próximo y disponible'; y que no va a 'renunciar, porque no puedo o no sé, a decir lo que pienso'. El ex presidente también dijo a los presentes en la sala Ernest Lluch de la Cámara Baja, donde se congregó una nutrida representación de la familia del puño y la rosa, que el PSOE 'se mueve mucho más cuando ve una gran dificultad y tiene un propósito, que cuando vivimos en una época de cierta bonanza, porque nos hacemos ciudadanos menos responsables'.

Entre aplausos y risas de los socialistas, insistió en que mantendría una 'distancia crítica cuando las cosas van bien'. Eso sí, añadió, 'cuando van mal, militancia pura y dura', una sentencia que le valió la aprobación del público, entre el que se encontraban decenas de diputados y ex ministros como Eguiagaray, Barrionuevo o Corcuera, así como los actuales titulares de Fomento e Interior, Blanco y Rubalcaba. Junto a González, en la mesa de oradores, el actual portavoz, José Antonio Alonso, y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

González centró su discurso en la actual crisis económica, abogó por reformar el sistema financiero y llamó a Bruselas a impulsar la salida de la recesión. 'Tenemos que tener un propósito claro y movilizarnos', aleccionó el ex líder socialista a la militancia, que tuvo palabras de recuerdo para Pablo Iglesias, fundador del PSOE, que hoy hace 100 años tomó posesión de su escaño de diputado en el Congreso.

'Lo peor —continuó González— sería dejarle a España una oposición tan irresponsable como ésta. José Luis, tenemos dos años y, en la época en la que vivimos, es un camino infinito: podemos hacer de todo'. González incidió de nuevo, antes de terminar su intervención, en el papel que está jugando el Partido Popular y animó a los socialistas, 'en estos momentos en los que nos da la depre colectiva', a movilizarse para tratar de salir de la crisis y evitar la llegada de los conservadores al poder.

'Si el PP te ve la yugular al descubierto, muerde sin compasión. Vamos a tapárnosla y a trabajar, para que esperen otros seis años más', sentenció el ex mandatario español, que obtuvo la réplica cuando le llegó el turno a Zapatero: 'No estamos deprimidos'. El actual presidente del Gobierno agradeció el apoyo a González en los momentos 'más difíciles' y dejó claro que los socialistas van a ser responsables para superar la crisis y alentar el crecimiento económico. 'Felipe, de depre nada, no estamos nada deprimidos los socialistas', dijo literalmente el leonés, quien subrayó los logros del PSOE en materia educativa y social.