La sentencia del Estatut de Catalunya no será tan inminente como se preveía la semana pasada.

El Tribunal Constitucional ha dedicado las tres reuniones que ha mantenido esta semana únicamente a resolver los recursos de súplica presentados por la Generalitat y el Parlament catalán para que el alto tribunal se declarara no competente para sentenciar sobre el texto catalán y para tratar de recuperar en las deliberaciones al magistrado Pablo Pérez Tremps.

Y ni siquiera ha podido zanjar ambas cuestiones, pese a que todos los magistrados están de acuerdo en el fondo.

El pleno volverá a reunirse de nuevo el próximo lunes. Fuentes jurídicas señalaron que de esta forma la presidenta, María Emilia Casas, someterá el séptimo borrador de resolución en el que trabaja desde el pasado 19 de mayo a la consideración de los diez magistrados que lo componen. Este intento propone declarar inconstitucionales 13 artículos e interpretar otros 24 .

Declara 'inadmisible' el intento de recupera¡ a Pérez Tremps

Si Casas constata que no cuenta con el suficiente apoyo para que su ponencia se convierta en sentencia, se pondrá en práctica la votación por bloques, artículos o preceptos de la resolución, extremo que se concretará entonces. Ningún magistrado ha mostrado su oposición a redactar de esta forma la sentencia.

Empezando el lunes, la votación no se fragmentará con un fin de semana de por medio y se podrá realizar a lo largo de la semana que viene. El artículo 254 de la Ley Orgánica del Poder Judicial señala que 'empezada la votación, no podrá interrumpirse sino en caso de fuerza mayor', aunque fuentes del alto tribunal han indicado que, si es necesario, se celebrará en varios días, por la propia extensión del recurso del PP que cuestiona la constitucionalidad de 112 artículos y 12 disposiciones del texto catalán.

Casas aún no ha presentado al pleno su propuesta de resolución

A la envergadura del recurso del PP, además, hay que sumar que los diez magistrados que forman el pleno (todos menos Pablo Pérez Tremps y con la vacante producida por el fallecimiento del magistrado Roberto García-Calvo) no han sido capaces de cerrar todavía uno de los dos recursos que tenían entre manos.

Y eso que están de acuerdo en el fondo: no pueden declararse no competentes para resolver la sentencia del Estatut, pese a que cuatro de sus miembros debían haber sido renovados en diciembre de 2007. Sólo discrepan en la forma, en los términos que deben constar en la resolución. Por eso tras tres reuniones, la más larga de unas tres horas, no pudieron terminar el auto que pondrá fin a esta iniciativa.

Y el único que notificaron hoy fue para 'declarar inadmisible' el recurso de súplica interpuesto por la Generalitat con el objetivo de que Pérez Tremps interviniera en la votación de los preceptos que no tuvieran relación con las relaciones del Govern con la Unión Europea.

El TC reitera que el que se vote la sentencia por artículos no es un hecho nuevo que permita revisar una decisión del pleno adoptada en febrero de 2007, cuando se estimó la recusación del PP. Añade que el hecho de que este magistrado —considerado progresista— quedara excluido de las deliberaciones de los recursos del PP y del Defensor del Pueblo es 'una decisión jurisdiccional firme contra la que no cabe recurso ni existe vía directa o indirecta de impugnación'.