La capital administrativa del Sáhara Occidental vivió en la tarde de ayer momentos de tensión debido a que decenas de jóvenes salieron a la calle para condenar que las autoridades marroquíes prohibieran la entrada y la salida al campamento de Gdem Izik levantado hace casi un mes a 18 km al este de El Aaiún.

En él hay más de 7.500 jaimas donde conviven unas 25.000 personas.

Fuentes saharauis aseguraron que no se podía 'ni entrar ni salir del campamento' y que además la presencia militar había 'aumentado enormemente'.

En El Aaiún, decenas de jóvenes saharauis decidieron salir a la calle para protestar contra esta estrategia de las autoridades marroquíes. Informadores saharauis relataron que los manifestantes armaron auténticas barricadas, lanzando piedras y jaleando gritos pidiendo la autodeterminación del Sáhara.

'Es la primera vez que veo algo así', contaba Abdalaji Daha, del Comité por la Defensa del Derecho a la Autodeterminación del Pueblo Saharaui (Codapso).

'La policía comenzó a intervenir violentamente, hay heridos y se nos prohíbe la entrada a los hospitales', agregaba. Sin embargo, otras fuentes resaltaron que las cargas policiales fueron leves.

El Frente Polisario ha advertido del peligro inminente de una intervención militar marroquí, aunque otras informaciones de cerca del campamento aseguran que 'por el momento la situación es tranquila'. La Asociación Sáhara Marroquí (ASM) ha enviado un comunicado en el que habla de 12 policías heridos graves.