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El PP avala a Camps aunque se agrave su futuro judicial

Cospedal lo defiende incluso si es procesado o imputado por la financiación

MARÍA JESÚS GÜEMES

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, no quiso hacer ayer cábalas sobre el futuro del president de la Generalitat, Francisco Camps, si su situación judicial se agrava.

'Es nuestro candidato', respondió cuando le preguntaron si su partido se lo podría replantear en caso de que el jefe del Consell sea procesado y tenga que sentarse en el banquillo por el caso de los trajes que le regaló la Gürtel. O responder ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana si este decide investigar la financiación ilegal del partido, teniendo en cuenta los tres informes de la Policía y de Hacienda que aportan datos sobre ella.

Barberá reconoce que si se demostrase delito cambiaría todo 'absolutamente'

'El señor Camps ha sido designado candidato por el Comité Electoral Nacional y es el cabeza de cartel del PP a la Generalitat valenciana y hasta... Y no hay nada más que decir', fue la forma en la que la mano derecha de Rajoy zanjó el asunto aunque a punto estuvo de derrapar y reabrir el debate al utilizar esa preposición.

El PP, a día de hoy, se mueve en un escenario y, hasta que este no cambie, la dirección nacional no se plantea otra cosa que defender a Camps. Sin embargo, dentro de la cúpula conservadora hay dirigentes que reconocen que el terreno está resbaladizo y que puede que se tenga que reconsiderar la candidatura de Camps si su proceso se complica mucho.

Ayer, en una entrevista en Onda Cero, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, dejó entrever esa posibilidad: 'En este momento Camps no tiene probada la comisión de ningún delito. En la andadura de los tiempos, en los plazos de las elecciones, antes de cualquier otra actuación está la candidatura y se va a presentar. Si hubiera otro tipo de actuación y de demostración de incursión en algún delito pues la intención cambiaría absolutamente'. El PP espera, en cualquier caso, que si se llega a ese extremo sea el propio Camps quien dé el paso y abandone su cargo.

Nadie de la dirección nacional acudirá hoy a un acto del PP valenciano

Pero como ese momento aún no ha llegado, Cospedal se limitó ayer a defenderlo ante una avalancha de preguntas. La número dos del PP afirmó que en sus filas la designación no había sentado mal, aunque es sabido que a muchos no les ha hecho gracia que se ampare a un imputado por cohecho continuado y piensan que les va a perjudicar de cara a las elecciones. Cospedal lo negó. 'Problema ninguno', afirmó tajante, aunque tan sólo unas horas antes había confesado en Veo7 que la perspectiva del banquillo no era 'la mejor idea para una campaña'.

La número dos del PP aseguró que nadie había hecho 'ningún comentario' sobre la ratificación de Camps y que no había habido ninguna 'llamada' de representante territorial o presidente autonómico para quejarse. 'Más bien al contrario, ha habido manifestaciones de apoyo', señaló.

También quiso quitar hierro al hecho de que nadie de la dirección acuda hoy al acto del PP valenciano en el que se presentan las candidaturas a alcaldías de más de 20.000 habitantes. Será el primero que Camps haga como candidato. Pero no tendrá aún su ansiada foto con Rajoy.

Cospedal mantuvo que 'las agendas del PP las decide el PP' y el presidente del partido 'irá a Valencia' pero cuando él decida. Además, confirmó que aún no hay 'fecha cerrada' para la proclamación. La dirigente conservadora insistió en que Camps es 'un hombre honrado' y mantuvo que la acusación se sustenta en la declaración del sastre, José Tomás García. 'Entre este, acusado de falsedad y falsificación de facturas, y Camps, nosotros creemos al presidente de la Generalitat. Creo que la comparación no se resiste y sería muy injusto que por este asunto Camps no fuera candidato y así lo considera mi partido', sentenció obviando que el juez Pedreira desimputó al sastre en 2010 porque su labor no tenía nada que ver con la elaboración de facturas.

Cospedal aseguró que la doctrina de los socialistas de incluir en sus listas a personas imputadas por delitos de corrupción, si no se han enriquecido, le parece 'de chiste'. 'Esto de ser juez y parte es bastante burdo', aseguró. La estrategia del PP, según dijo, es la de tratar cada caso de manera particular porque 'no todos los procedimientos son iguales'. El PP también acusa a la Fiscalía de 'doble vara de medir' e incluye a jueces y policías en su teoría de la conspiración. D

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