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Zapatero señala como sucesor a Rubalcaba

Todos los secretarios regionales del PSOE apoyan la candidatura de Rubalcaba. El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, afirma: 'Nuestra obligación  es presentar al mejor candidato'. Blanco también anuncia la

GONZALO LÓPEZ ALBA

La guerra de los cuatro días que estalló en el PSOE tras la hecatombe electoral del 22-M se zanjó el viernes —al menos de momento— con un pacto entre José Luis Rodríguez Zapatero y los barones del partido para asegurar la estabilidad del Gobierno y proclamar por unanimidad a Alfredo Pérez Rubalcaba como sucesor.

El vicesecretario general, José Blanco, que informó de los resultados de la cumbre celebrada en Ferraz, rechazó que se haya producido 'un dedazo' en la designación del candidato para 2012, ya que el Comité Federal aprobará este sábado la convocatoria de las elecciones primarias que exigen los estatutos.

La cúpula socialista descarta un congreso antes
de las elecciones

Pero fue el propio Zapatero quien, rompiendo el compromiso de 'neutralidad' que asumió tras anunciar el 2 de abril que no optaría a un nuevo mandato, tomó la iniciativa de proponer a su vicepresidente primero en el cónclave de los 25 —los 21 secretarios generales de federación y el de las Juventudes, más Zapatero, Blanco y Manuel Chaves—, una reunión que convierte el Comité Federal, al que pertenecen 246 dirigentes, en un mero trámite.

'El señor Rodríguez Zapatero ha expresado el deseo de que Alfredo Pérez Rubalcaba sea el candidato (en 2012), un deseo compartido por todos los secretarios generales', informó Blanco. El vicesecretario general confirmó que 'la propuesta' la hizo Zapatero en su intervención inicial y fue secundada, sin excepción, por todos los dirigentes territoriales, desde el catalán José Montilla al madrileño Tomás Gómez, pasando por el andaluz José Antonio Griñán, los que más se inclinaban por la alternativa de Carme Chacón.

Tras el paso atrás dado el jueves por la ministra de Defensa, no se vislumbra ninguna candidatura alternativa, lo que de confirmarse permitiría hacer la proclamación oficial de Rubalcaba el 18 de junio. Si hubiera otros candidatos que cumplieran los requisitos, la votación sería el 26 de junio.

A pesar de ello, Blanco sostuvo que los socialistas 'no estamos renunciando a las primarias', al tiempo que atribuía a los secretarios generales la capacidad de representar 'el deseo de la gran mayoría de los militantes'.

El número dos del PSOE, que no ocultó su satisfacción por la resolución de la crisis abierta tras el batacazo electoral, subrayó que los ciudadanos no desean que se enreden 'en temas internos' y ensalzó a Rubalcaba: 'Es el candidato que más quiere nuestra gente y al que más temen nuestros adversarios'.

Algún líder regional expresó sus dudas de que se pueda agotar la legislatura 

En contrapartida a la proclamación por unanimidad de la candidatura de Rubalcaba, Zapatero aleja el espectro de un congreso antes de las elecciones generales. 'En ningún caso está previsto celebrar un congreso adelantado, extraordinario u ordinario', enfatizó Blanco de modo 'rotundo y taxativo', aunque en la reunión hubo quien insistió en defender su idoneidad en la situación actual. El mismo criterio se aplicará a los congresos regionales, que tampoco se adelantarán.

Para satisfacer la demanda pública de una reflexión de fondo planteada por el lehendakari, Patxi López, se acordó convocar para primeros de septiembre una conferencia política de carácter programático, como ya habían convenido previamente Zapatero y López. Su propósito, según señaló Blanco, es que el PSOE concurra a las elecciones generales no sólo con 'las mejores candidaturas', sino también con 'las mejores ideas'.

Al descartar la convocatoria inmediata de un congreso, se aleja el horizonte de un adelanto electoral. Blanco señaló a este respecto que la reunión de ayer sirvió también para certificar que los socialistas están 'unidos para respaldar al Gobierno'. Asimismo señaló que 'la voluntad' ratificada por el presidente es agotar la legislatura y recordó que se trata de una competencia exclusiva. Un sector importante de la estructura dirigente del PSOE opina que no tiene sentido alargar 'la agonía' del Gobierno y seguir 'haciendo el trabajo sucio al PP' para que Rajoy recoja los frutos sin hacer ningún esfuerzo ya que no hay ningún indicio que permita albergar la esperanza de una recuperación económica que pudiera invertir la tendencia electoral. Con este análisis, ese sector es partidario de no volver a reunir el Parlamento tras las vacaciones de verano y convocar las elecciones generales para noviembre.

En sintonía con este parecer, ayer hubo al menos una voz, aunque minoritaria, que cuestionó ante Zapatero que se pueda agotar la legislatura. Sin embargo, se ha impuesto como criterio mayoritario que es mejor alejar la convocatoria electoral lo más posible del tsunami del 22 de mayo. Además, las conversaciones exploratorias para negociar los apoyos parlamentarios necesarios para aprobar el techo de gasto y los Presupuestos para 2012 'van bien', según fuentes gubernamentales. Si estos apoyos parlamentarios no se confirmaran, la situación se replantearía en julio.

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