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Una marea de indignación tomará hoy las calles del mundo

Ciudadanos de 951 ciudades de los cinco continentes exigirán una 'auténtica democracia'. Intelectuales de primera fila reclaman un 'cambio de régimen global'

ELENA HERRERA

Desde que el pasado mayo miles de ciudadanos expresaron en la calle su descontento ante un sistema político y económico que ni les gusta ni les representa, muchos han sido los comunicados, cartas de adhesión y manifiestos de apoyo a un movimiento, el 15-M, que ya ha dado la vuelta al mundo. A pocas horas de su primera prueba de fuego a escala global, las movilizaciones que tendrán lugar hoy en 951 poblaciones de 82 países, los indignados han recibido un espaldarazo de excepción, el apoyo de destacados escritores, activistas e intelectuales.

Figuras representativas de la izquierda alternativa como el escritor Eduardo Galeano, el analista político, filósofo y escritor Noam Chomsky , la economista y escritora Naomi Klein, la activista india Vandana Shiva, o el filósofo político Michael Hardt han firmado, junto a otros activistas de todas partes del mundo, el manifiesto Unidos por una democracia global con el que exigen un 'cambio de régimen global'.

La reivindicación democrática y del Estado del bienestar centra las protestas

Aunque la reclamación de una 'auténtica democracia' será el nexo de unión de todas las convocatorias programadas para hoy, algunas protestas tienen características y reivindicaciones específicas. En Brasil, por ejemplo, los ciudadanos están hartos de la corrupción, enquistada en las instituciones públicas y los indignados han hecho de las escobas su estandarte, simbolizando la necesidad de limpiar las instituciones. Italia, tan acostumbrada a las manifestaciones, aprovecha esta jornada para volver a plantarle cara a su primer ministro, Silvio Berlusconi, aunque en esta ocasión será para protestar por los recortes sociales de su Gobierno. En Grecia, el desafío de los indignados a los poderosos no supone una novedad tras meses de descontento popular, por lo que la noticia radicará en comprobar si el movimiento ha perdido fuelle o no.

En EEUU, tras haberse plantado en el parque Zuccotti de Nueva York, se multiplican las marchas por todo el país, con la sensación de que la ocupación de Wall Street ha sido el desencadenante de este grito planetario. Nada más lejos de la realidad, aunque la acampada en el pulmón financiero mundial ha supuesto un gran impulso mediático.

Mientras, en los países asiáticos gobernantes y multinacionales afrontan con calma la jornada. Aunque parece que el crecimiento económico limará el nivel de indignación popular, las autoridades de algunas urbes europeas se muestran cautas ante el 15-O. Es el caso de Londres, escenario de revueltas en agosto, que blindará el corazón financiero de la City. O de Frankfurt y Berlín, cuyas estructuras ferroviarias fueron saboteadas con bombas incendiarias el pasado lunes.

En este contexto de indignación planetaria es donde surge la iniciativa de lanzar el manifiesto internacional Unidos por una democracia global que suscriben también viejos conocedores de los movimientos antiglobalización como ATTAC, Globalise Resistance o Egality y las asambleas ciudadanas de Buenos Aires, Londres, Boston, São Paulo, Melbourne o de la Puerta del Sol de Madrid.

Griegos e italianos clamarán contra los recortes sociales de sus gobiernos

Los firmantes del texto, que comenzó a confeccionarse el pasado mayo y que se elaboró con las aportaciones de los movimientos creados tras las eclosión del 15-M español, animan a los ciudadanos a 'recuperar el control' sobre las decisiones que les afectan. 'Nuestros trabajos, nuestra salud, nuestra vivienda, nuestra educación y nuestras pensiones están controladas por los bancos internacionales, el mercado, los paraísos fiscales, las corporaciones y las crisis financieras', denuncian. Y lanzan una advertencia: 'Estamos perdiendo el control sobre nuestras vidas. Esto debe terminar. Esto va a terminar. Esto es democracia global. Esto es lo que hoy exigimos'.

Los promotores hacen suyo el grito revolucionario de los zapatistas mexicanos para decir alto y claro su mensaje: '¡Ya basta! Aquí el pueblo manda y el gobierno obedece'. Al mismo tiempo, llaman a 'globalizar' la Plaza Tahrir de El Cairo y la Puerta del Sol de Madrid, símbolos de las movilizaciones en España y Egipto.

Sin eufemismos, apuntan directamente a organismos como el FMI, la OMC, el G-8 y el G-20 o el Consejo de Seguridad de la ONU como los culpables de la creciente pérdida de soberanía de los ciudadanos. 'Las instituciones internacionales no democráticas son nuestro Mubarak global, nuestro Assad mundial, nuestro Gadafi internacional', denuncian.

Los promotores esgrimen la presión popular que forzó la dimisión del líder egipcio Hosni Mubarak tras tres décadas de dictadura como paradigma de la voluntad ciudadana de 'no permitir' que determinadas organizaciones dirijan sus vidas. 'Todos nacimos iguales. Africanos y asiáticos son iguales que europeos y americanos. Nuestras instituciones deben reflejar esto o ser derrocadas', advierten.

Madrid. De Cibeles a la Puerta del Sol, el icono del 15-M

En Madrid, cinco columnas de manifestantes partirán durante el día de hoy desde diferentes barrios de la capital para confluir en la Plaza de Cibeles, lugar de inicio de la manifestación, que comienza a las seis de la tarde. La marcha discurrirá por el centro de Madrid hasta llegar a la Puerta del Sol. Allí se instalarán varias pantallas en las que se proyectarán las imágenes que vayan llegando de las manifestaciones que se celebran a lo largo y ancho del globo. Tras la marcha, se celebrará una asamblea y los grupos de trabajo se reunirán para debatir, entre otras cosas, sobre el futuro del movimiento. Durante el día habrá otras actividades, como un ‘grito mudo' o la actuación de la orquesta Solfónica. 

Barcelona. Los indignados vuelven a la plaza Catalunya

La manifestación de Barcelona comienza a las 17.00 horas en la plaza Catalunya, a la que acudirán los distintos colectivos vestidos con colores diferentes y reunidos en columnas desde municipios vecinos y barrios de la ciudad. Además del lema global, la convocatoria catalana añade el de “Pasemos de la indignación a la acción” y contará con la presencia de profesionales y usuarios de la educación y la sanidad, además de las plataformas de afectados por las hipotecas y de solidaridad con los desahucios. También hay manifestaciones, a las 18.00 horas, en Reus (calle Sant Joan), Tarragona (Imperial Tarraco), Girona (plaza del Barco) y Lleida (calle Ramon Mateu), y en Artés (Can Cruselles, 17.00 horas).

Marchas en más de 60 ciudades

En España serán más de 60 ciudades las que celebren hoy manifestaciones. El lema común, ‘Unidos por un cambio global’, podrá ser acompañado en cada ciudad de otros eslóganes que remitan a la “opresión que ejercen los políticos y los mercados sobre la ciudadanía”, tal y como explicaron varios portavoces en la presentación de las marchas el pasado jueves. Las protestas se extenderán desde grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia a otras más pequeñas como Albacete, Almería, Burgos, Ourense, Pamplona, Lugo, Lanzarote, Jerez de la Frontera, Reus o Soria. En cada ciudad se celebrarán actividades diferentes, desde comidas populares a asambleas o conciertos.

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