Una noche con una chica latina y una botella de whisky. Ese es el premio de la rifa que se publicita en varias localidades cántabras y que ha llevado a la Policía a abrir una investigación. Las participaciones cuestan 20 euros y se venden en un restaurante de Anero, un disco bar de Laredo, una peluquería y un locutorio en Santander. El cartel muestra a una chica en ropa interior, en actitud sensual ante una cama y está pegado en la fachada de decenas de comercios.

El revuelo que ha suscitado el sorteo ha llevado a su promotor a anular la iniciativa, según explica el dueño de la peluquería encargada de vender las participaciones. 'Nosotros no llegamos a vender ningún boleto', asegura. Según explica este hombre, el promotor es un cliente de la peluquería, de 20 años, que le pidió que colgara el cartel publicitario y vendiera papeletas.

Quien tuviera el boleto cuyas dos últimas cifras coincidieran con el premio Gordo del sorteo de la Lotería Nacional podría pasar la Noche de Reyes con una 'chica latina'. 'La idea era que el ganador fuera a un puticlub con el organizador, escogiera a una chica y se fuera con ella', prosigue el peluquero. El promotor no responde al teléfono de contacto que aparece en los carteles. 'Queremos que dé la cara, que diga que nosotros no tenemos nada que ver', insiste el dueño de la peluquería.

La Policía investiga si la chica que aparece en el cartel existe, si ha habido estafa o si se ha cometido una infracciónadministrativa, ya que se necesita permiso para organizar una rifa.

Por su parte, la directora general de la Mujer de Cantabria lamentó que se hubiera organizado la rifa y condenó cualquier acto que vaya en contra de la dignidad de las mujeres, informa Efe. También mostró su rechazo a la iniciativa la presidenta de la Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales (Cavas) en Cantabria, Eva Gómez. 'Mercadea con la mujer cual jamón de jabugo', criticó.

Además, en Sevilla, una discoteca mantiene que mañana sorteará una operación de aumento de pecho entre sus clientas, en cooperación con una clínica estética. No es la primera vez que se ofertan acciones como esta, aunque las quejas de asociaciones y médicos han llevado a suprimirlas en la mayoría de ocasiones.