Encarna la experiencia política dentro de la izquierda abertzale que hizo la transición de la violencia a las vías exclusivamente democráticas. Y es la figura simbólica en el 'nuevo tiempo' abierto en el País Vasco. EH Bildu, la coalición formada por la izquierda abertzale, Eusko Alkartasuna, Aralar y Alternatiba, le quería a él, al exlíder de Batasuna, Arnaldo Otegi, como su candidato a lehendakari para las próximas elecciones vascas. Pero la Justicia se lo impidió declarando su ilegibilidad hasta 2022, cuatro años después de que salga de la cárcel, donde cumple condena por tratar de reconstruir la ilegalizada Batasuna.

La elección de su sustituto ha estado rodeada de un secretismo que ha sido alimentando la propia coalición independentista. Hasta este martes. En rueda de prensa, los principales promotores de EH Bildu han anunciado que su próxima candidata a lehendakari será Laura Mintegi. Pero el perfil de esta profesora de universidad de 57 años dista por completo del exdirigente de Batasuna. La coalición ha optado por una trayectoria académica y cultural en defensa de la identidad vasca más que por una militancia estrictamente política. Porque Mintegi no ha estado estrictamente en la primera línea a pesar de que en 1987 y 1989 participó en las listas de Herri Batasuna en las elecciones al Parlamento Europeo, y a que el año pasado fue la número dos de la lista de Amaiur para el Senado por Bizkaia, si bien no resultó elegida.

Como se esperaba, la coalición ha optado por una vizcaína -nació en Estella, Navarra, pero siempre ha vivido en Bilbao-, para disputar al PNV su histórica hegemonía en la provincia y porque dando por conseguida su mayoría en Gipuzkoa, la victoria en el principal territorio vasco por número de habitantes resultaría determinante para que Mintegi se convirtiera en la nueva lehendakari. Y ha decidido hacer público su nombre antes de que finalice el verano, ante los rumores que apuntan que el actual lehendakari, Patxi López, adelantará los comicios al próximo otoño.

Su trabajo como escritora, si bien ha sido traducido a numerosos idiomas, ha cobrado especial fuerza en el País Vasco. Es conocido y reconocido su trabajo literario, del cual su obra más conocida es Sisifo maite minez (Sísifo enamorado) publicado en 2001, que trata del amor y de sus locuras. Ha recibido diferentes premios por su obra literaria pero, además, ha participado como jurado en numerosos galardones de escritura, además del René Cassin de derechos humanos. 

Pero, sobre todo, cabe destacar su labor como impulsora de la lengua vasca y de su cultura. Es profesora de la Universidad del País Vasco en materia de didáctica lingüística y literaria a pesar de haber obtenido la licenciatura en Historia y el doctorado en psicología en los años 80 del siglo pasado. Y la Euskaltzaindia, la academia encargada de cuidar, analizar, fomentar y regular el euskera la integró entre sus filas en 2006.

Mintegi, además, ha formado parte de los grupos de apoyo al diario Gara, a los procesados y posteriormente absueltos en el caso Egunkaria y ha reclamado en numerosas ocasiones la puesta en libertad del propio Otegi. Su trabajo consiste ahora en convencer a la sociedad vasca de la voluntad democrática de la izquierda abertzale y en demostrar que el proyecto independentista es una opción de futuro en unas elecciones en las que, según las encuestas, el PNV podría volver al poder tras arrebatárselo al PSE de Patxi López, que gobierna en minoría desde hace dos meses. El último Euskobarometro dejó de manifiesto que 6 de cada 10 vascos quieren un nuevo lehendakari.