Público
Público

Rajoy apuesta por la 'marca popular' en Catalunya para ser segunda fuerza

El PP desecha la estrategia para el 21-O en Galicia y desplaza a sus ministros y dirigentes a la campaña del 25-N. Las encuestas internas confirman que al partido le funciona el rechazo frontal al independentismo de Mas

ANA PARDO DE VERA

Nada que ver la catalana con la campaña que dio a Alberto Núñez Feijóo una nueva mayoría absoluta en Galicia, con cuatro escaños más (41) y con menos votos (-130.000). Para las elecciones del 21 de octubre, el presidente de la Xunta convirtió su candidatura en la única marca electoral y optó por hacer desaparecer las siglas del PP y el logo de la gaviota de sus carteles. En Catalunya, sin embargo, la candidata Alicia Sánchez-Camacho ha hecho exactamente lo contrario al comprobar que la deriva independentista de Artur Mas se iba a convertir en el único tema de campaña desde la manifestación de la Diada del 11 de septiembre, y apostó por la marca popular en toda su amplitud: sólo el PP garantiza la unidad de España.

Todos los ministros salvo los de Defensa, Economía, Hacienda y Educación, han desembarcado o tienen previsto hacerlo en Catalunya para dar su apoyo a Sánchez-Camacho en distintos mítines y actos. El propio Mariano Rajoy, que tenía intención de estar cuatro veces (una por provincia) en la campaña, incluido el cierre del viernes 23, sorprendió el fin de semana anunciando desde Catalunya que el martes 20 volvía a acompañar a la candidata a la Presidencia de la Generalitat en un mitin.

Efectivamente, ayer y sin apenas previsión, Rajoy llegó a Barcelona en un acto que constituyó el culmen de una jornada catalana marcadamente popular, en la que intervinieron, en distintos actos y por las cuatro provincias, los ministros de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón (Girona), y de Agricultura, Miguel Arias Cañete (Lleida), y el vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas (Baix Penedès, Tarragona).

La vicepresidenta, ocho ministros (Exteriores, Justicia, Interior, Fomento, Empleo, Industria, Agricultura y Sanidad) la cúpula del PP nacional (Dolores de Cospedal, Carlos Floriano, Esteban González-Pons y Arenas) y dirigentes regionales como Feijóo, la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi; Esperanza Aguirre o el líder del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, se están volcando con Catalunya y apostando unilateralmente por la marca popular tras la directriz de Rajoy en el Comité Ejecutivo Nacional del PP del 22 de octubre: 'Esta batalla la vamos a dar'.

La cúpula del PP, con Rajoy al frente, ha hecho campaña en Catalunya, no como en Galicia

Además, en el partido están convencidos de que, si no fuera por su agenda internacional, el presidente del Gobierno iría 'al menos una vez más a Catalunya'. Pero el jueves 22 y el viernes 23, Rajoy debe acudir al Consejo Europeo, en donde se debatirán los Presupuestos de la UE para 2013. En esta ocasión, el tema es particularmente espinoso, pues el jefe del Ejecutivo ya se ha manifestado totalmente en contra de que España pierda los 20.000 millones de euros que se prevén fuera con las nuevas cuentas. Precisamente, el alcance y duración de estas negociaciones en Bruselas podrían frustrar los deseos de Rajoy de acompañar a Sánchez-Camacho en su mitin de cierre de campaña.

La intención del PP catalán era hacer una campaña potente, pero en un nivel medio-bajo de participantes llegados de Madrid: la cúpula del partido, Rajoy en tres mítines (los mismos en que estuvo en Galicia y País Vasco) y algún miembro esporádico del Gobierno sin mayor protagonismo, ya que la gestión de la Administración central, como a Feijóo, no favorece las aspiraciones de la candidata catalana. Sin embargo, la apuesta de CiU por cubrir la campaña con la reivindicación independentista funcionó para Mas y funcionó para el PP, pues todas las encuestas y análisis sociológicos coinciden en que PP y CiU se retroalimentan con este debate.

El PP cree que acaparará los votos que pierda el PSCporque 'jamás se irían al nacionalismo'

También las encuestas internas del partido confirman este punto y, aunque no dan a CiU la mayoría absoluta, Rajoy personalmente ha decidido poner toda la carne en el asador para, por un lado, aprovechar que la campaña no roza apenas la gestión económica (en donde el PP saldría perdiendo) y, por otro, sacar partido de una previsible debacle del PSC -que también recogen las encuestas del PP- y llevar los votos socialistas a su cesto.

Ésta es, por ejemplo, la razón que ha llevado al PP a volcarse en la provincia de Barcelona, incluyendo la presencia de Rajoy dos veces allí y la celebración de la XIX Intermunicipal del partido en la Ciudad Condal los días 25 y 26 de octubre, cuando se había anunciado hacía tiempo que sería en Galicia. El PP quiere hacerse con los votos de los desencantados del PSC en el llamado cinturón rojo barcelonés, votos en su mayoría que el PP entiende que 'jamás se irían al nacionalismo' y que podrían ser suyos ahora.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias