El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha asegurado entender que haya 'un poco' de decepción ciudadana ante la figura de su predecesor Jordi Pujol, pero ha recordado que desde hace más de 10 años no toma decisiones en CDC ni CiU.

Lo ha dicho este sábado en el Consell Nacional conjunto que CDC y UDC han celebrado en Cerdanyola del Vallès, al referirse a la confesión que hizo en julio el expresidente de la Generalitat entre 1980 y 2003, de que tuvo dinero sin regularizar en el extranjero.

Mas ha admitido que Pujol es un 'símbolo muy grande que queda tocado' y que eso tiene un impacto en la ciudadanía, pero sostiene que lo justo es señalar que el expresidente no ha tenido responsabilidades en el partido ni ha participado en la toma de grandes decisiones.

El expresidente catalán Jordi Pujol confesó en una carta difundida el pasado 25 de julio que durante 34 años habían mantenido una fortuna en el extranjero con dinero heredado presuntamente de su padre y que recientemente habían regularizado. Sin embargo, ni su hermana ni su cuñado sabían nada de dicha herencia que, aparentemente, sólo recayó en Pujol, su esposa Marta Ferrusola y sus siete hijos.

El movimiento vecinal catalán ha iniciado contactos con entidades de la sociedad civil para personarse de forma conjunta como acusación popular frente a Pujol.  El objetivo que persiguen es recuperar para la sociedad civil catalana la iniciativa de exigir responsabilidades a su ex president, después de que el sindicato ultraderechista Manos Limpias presentara una querella contra el expresident.

La acusación popular la impulsan la Federació d'Associacions de Veïns i Veïnes de Barcelona, la Confederació d'Associacions Veïnals de Catalunya y otras organizaciones como el Observatori DESC, como reveló recientemente Público.