La segunda celebración del Día de la Memoria en Euskadi se limitará a una breve declaración del lehendakari, Patxi López, acompañado de sus consejeros en el Palacio de Ajuria Enea. La falta de acuerdo entre las formaciones con representación parlamentaria ha motivado el tercer fracaso de una iniciativa de consenso desde que ETA anunciara el final de la violencia hace 27 días. Esta vez el detonante fue el concepto de 'víctimas' a las que homenajear.

EA y Aralar no asistieron al primer Día de la Memoria  La celebración del Día de la Memoria está incluida en la Ley de Reconocimiento y Reparación a las Víctimas del Terrorismo de 2008. En 2010 se celebró por primera vez con la asistencia de todos los partidos a excepción de EA y Aralar, que reclamaron incluir a las víctimas de abusos policiales.

Este año, el Gobierno vasco ha apostado por recordar 'a todas las víctimas', pero sin equipararlas, según explicó el consejero de Interior, Rodolfo Ares.

Su decisión está en sintonía con la intervención del lehendakari en el debate de política general y con los avances en la ponencia que sobre el tema discute el Parlamento vasco. Está previsto que en 2012 el Gobierno vasco comience a reconocer y compensar a las víctimas de abusos y excesos policiales. La intención de López es incluir en el homenaje de mañana a los que sufrieron los excesos policiales relacionados con el proceso de transformación del Estado de una dictadura a la democracia.

La ampliación del homenaje provocó el rechazo del PP. Su portavoz en la Cámara de Vitoria, Leopoldo Barreda, dijo ayer que su partido no consentirá que se diluya la memoria de las víctimas de ETA 'en función de intereses partidistas o voluntades de equiparación'.

Se eligió el día por ser el único sin un atentado terrorista Según Ares, el primer rechazo a un acto conjunto fue expresado por Bildu y posteriormente PP y PNV mostraron discrepancias que impidieron el acuerdo. En 2008 se eligió el 10 de noviembre por ser el único día del calendario sin un atentado terrorista.