El curso escolar comienza muy agitado, con amenaza de rebelión en las aulas. Los profesores irán a la huelga en Madrid, probablemente el día 14, para protestar contra los recortes programados por el Gobierno de Esperanza Aguirre, que ha recortado en 3.200 profesores interinos la plantilla de Secundaria y ha anunciado un aumento del horario lectivo de 18 a 20 horas semanales.

La presidenta de la Comunidad deposita su confianza en los profesores y en que no vayan a la huelga, entre otras razones porque la legislación 'permite u obliga' a incrementar hasta 20 horas su jornada laboral, que es inferior a la del 'resto de madrileños'.

Aguirre ha hecho hoy estas declaraciones tras la reunión del Consejo de Gobierno de la Comunidad, en referencia a la huelga que anunciaron ayer los sindicatos de educación de Madrid tras una multitudinaria asamblea.

'Se hicieron funcionarios  porque creen en la enseñanza pública y están dispuestos a hacer un esfuerzo' 'Son funcionarios públicos, que se hicieron funcionarios precisamente porque creen en la enseñanza pública, y porque están dispuestos a hacer un esfuerzo suplementario en favor de la educación pública', ha esgrimido Aguirre, quien envió anteayer una carta a los 18.000 docentes de secundaria para pedir su colaboración, de cara al incremento de jornada.

Este esfuerzo 'suplementario' conllevará un ahorro de casi 80 millones de euros, según especificaba la presidenta en la misiva, y será retribuido a cambio de una subida salarial para parte del profesorado.

Algunos docentes, como los responsables de departamento, trabajaban este curso menos de 18 horas, ha indicado la presidenta, por lo que a estos no tendrán 'ninguna subida salarial'.

La retribución que compensará este incremento de la jornada se acordará en la Mesa Sectorial de Educación convocada por la consejería para los próximos días, una reunión que ya se convocó durante el verano con este mismo motivo, pero que tuvo que ser suspendida ante la negativa de los sindicatos a acudir.

Algunos docentes han criticado que se verán obligados a impartir asignaturas que desconocen debido a esta modificación, pero Aguirre ha querido 'dejar bien claro' que la legislación vigente establece las materias que puede impartir cada docente de acuerdo a su especialidad, por lo que un profesor de física, está cualificado para dar clase de matemáticas.

'No va a haber una merma de la calidad de la enseñanza, todo lo contrario' 'Esta establecido por ley, por tanto no hay ninguna cambio, así que no va a haber una merma de la calidad de la enseñanza, todo lo contrario', ha recalcado la presidenta.

Por su parte, la consejera de Educación, Lucía Figar, ha pedido a los docentes que 'sean responsables y actúen con sentido del deber' debido a los 'tiempos que corren'.

Por otro lado, la presidenta ha considerado 'muy relevante' que el ministro de Educación, Ángel Gabilondo, haya 'solicitado' a la Comunidad que distribuyan los libros de texto gratis, una cuestión que le gustaría saber si 'lo pide como padre' o, si como ministro 'va a dar él el dinero'.