El presidente de la Generalitat de Valencia, Francisco Camps, asegura que sólo tiene 900 euros en su cuenta bancaria y otros 1.389 en una cuenta compartida. Así lo ha declarado el propio político del PP al Boletín Oficial de las Cortes Valencianas, obligado, como el resto de diputados valencianos, a publicar sus bienes en virtud del acuerdo por la transparencia que alcanzó la Cámara autonómica valenciana. (Documento en PDF)

Ese dinero, un plan de pensiones de 8.000 euros y un coche, modelo SAAB 900, de 15 años de antigüedad y que está valorado en unos 1.500 euros son los únicos activos de naturaleza no inmobiliaria que declara el presidente de la Generalitat. En cuanto a propiedades inmobiliarias sólo declara una, de la que participa al 50%, valorada en poco más de 110.000 euros.

En una situación financiera más boyante asegura encontrarse el ex secretario general del PP valenciano, Ricardo Costa, quien declara tener un patrimonio líquido de unos 3.000 euros, un plan de pensiones de casi 50.000 euros y un seguro de vida de más de 150.000 euros, entre otros bienes no inmobiliarias. También declara un automóvil BMW de 53.000 euros. En cuanto a propiedades mobiliarias, Costa declara tres propiedades con un valor de algo más de 240.000 euros.

El automóvil de Rita Barberá tiene casi los mismos años que ésta al frente de la alcaldía de Valencia. La alcaldesa y cofundadora del PP valenciano asegura que su coche es un Lancia de 21 años.

Por lo demás, Barberá declara que, entre títulos de valores en diversos bancos, planes de pensiones y dinero en diversas cuentas corrientes, dispone de un patrimonio no inmobiliario de 295.000 euros. Sin embargo, no tiene ninguna casa a su nombre

Más sorprendente es el patrimonio que ha declarado Juan Gabriel Cotino, uno de los vicepresidentes de la Generalitat. Algo menos de dos millones de euros adornan su patrimonio personal.

Cotino tiene intereses en sociedades como Pomafer s.l, Alqueria Dolores s.l o Inverseco s.l, además de acciones en Banco de Valencia y un plan de pensiones.