Los consejos de administración de CaixaBank y Bankia han dado luz verde esta tarde a la fusión entre ambas entidades para crear el primer banco de España.

La unión formará una entidad que sumará unos activos de 664.027 millones de euros, unas 6.600 sucursales (4.400 la entidad de origen catalán y más de 2.200 la entidad nacionalizada) y una plantilla conjunta superior a los 51.000 empleados (casi 35.600 CaixaBank y unos 16.000 Bankia).

No obstante, se da por supuesto que la fusión comportará tanto salidas de personal como cierres de oficinas, si bien no ha trascendido aún el tamaño del ajuste.

El nuevo banco seguirá operando con la marca Caixabank, mantendrá su sede en Valencia y estará comandado por el tándem formado por José Ignacio Goirigolzarri, como presidente, y Gonzalo Gortázar, como consejero delegado.

Esta operación es la de mayor calado que ha protagonizado CaixaBank en su dilatada historia y llega tras una década marcada por continuas adquisiciones que han contribuido a llevar al banco de La Caixa a la cumbre bancaria en España.

La fusión hace también realidad una vieja aspiración de Isidre Fainé, actual presidente de la Fundación Bancaria La Caixa, como es la unión de lo que fueron las dos grandes cajas de ahorro españolas: La Caixa, en Catalunya, y la madrileña Caja Madrid (embrión de lo que ahora es Bankia).

Rueda de prensa en Valencia

Tal como estaba previsto, los consejos, reunidos esta tarde desde las 17:00 horas, han avalado iniciar el proceso de fusión entre ambas entidades, que mañana darán cuenta del acuerdo en rueda de prensa. 

Goirigolzarri y Gortázar explicarán este vienes los detalles de la operación en una comparecencia ante los medios a mediodía, en Valencia (donde ambas entidades ya tienen actualmente sus respectivas sedes sociales).

La fusión, cuya ecuación de canje aún no se ha dado a conocer, deberá recibir ahora la autorización de los reguladores y también ser aprobada por las respectivas juntas accionistas de los dos bancos.

El Estado, a través del FROB, tendrá con toda probabilidad presencia en el consejo de administración de la entidad resultante de la integración de Bankia en CaixaBank, de la que controlará alrededor de un 15%, como su segundo accionista (el primero, con un 30%, será la Fundación Bancaria La Caixa).

Se prevé que el órgano de gobierno del banco fusionado esté formado por un total de 15 miembros, de los cuales diez serán independientes, dos ejecutivos (Goirigolzarri y Gortázar) y otros tres dominicales, es decir, en representación de sus principales accionistas: Criteria, en nombre de la Fundación Bancaria La Caixa, elegirá a dos, y el FROB, en representación del Estado, tendrá otro consejero.

La incógnita es cuánto tiempo permanecerá el Estado en el accionariado de la entidad, una presencia que suscita recelos en el Gobierno catalán, y también qué parte de los 22.424 millones de dinero público que recibió Bankia cuando fue rescatada en 2012 se acabará recuperando con esta operación.