El año de su salida a bolsa ha sido poco lucido para Criteria Caixa Corp, la corporación de empresas participadas por La Caixa. El holding obtuvo en 2007 yn beneficio neto de 1.726 millones, un 20% menos respecto al ejercicio anterior.

El motivo que esgrimió ayer el presidente, Ricard Fornesa, es que en 2006 hubo mayores ingresos extraordinarios por la venta de sus participaciones en Banc Sabadell y la inmobiliaria Colonial. Sin tener en cuenta este dato, el resultado recurrente, de 1.189 millones, amentó un 31%.

El otro revés para el grupo es la caída de la acción, que ha resultado más castigada incluso que el Ibex. La oferta de suscripción se realizó a 5,25 euros por acción. Desde su salida al parqué el 10 de octubre hasta el cierre del año, el título cayó ligeramente hasta 5,17. Pero desde el 1 de enero se ha depreciado casi un 20% más. Al cierre de la sesión de ayer el valor de la acción se encontraba a 4,13. 'Está muy infravalorada', señaló Fornesa, que consideró que su valor real es de 7,4.

El último trimestre estuvo marcado por la compra de la compañía de seguros Caifor, el 8,9% de Bank of East Asia y, ya en enero, la culminación de la opa sobre Aguas de Barcelona. Las operaciones supusieron una inversión de 2.430 millones.

Cautela por las turbulencias

Uno de los propósitos de Criteria es aumentar la participación en el sector financiero, con un peso en la cartera del 18% frente al 82% del industrial.

Sin embargo, el grupo, nada ajeno al contexto actual, ha puesto el freno en sus operaciones. 'No aceleraremos las inversiones en este periodo de incertidumbre, explicó el director general, Francisco Reynés. 'Actuaremos con extraordinaria cautela, analizando a fondo las oportunidades', considró Fornesa.

El holding estudia realizar una o dos inversiones importantes, que comportarán el desembolso de entre 500 y 2.000 millones por cada una, si bien no concretó en qué, si bien reiteró que tiene el ojo puesto en la banca del este de Europa, China y Estados Unidos.

Dos años de recuperación

Fornesa consideró que la economía española goza de 'buena salud' y dijo que existe una 'crisis relativa'. Lo ejemplificó con las grandes ganancias que han tenido algunos bancos. Apuntó que serán preciso dos años para volver a una situación totalmente recuperada. 'A finales de 2009 la situación se normalizará', dijo. Para algunos sectores auguró una mejora en los próximos seis meses.