El cabeza de lista de CiU al Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, ha desvelado este jueves su decálogo de diez condiciones para dar apoyo estable al futuro Gobierno español, que el dirigente nacionalista da por hecho que estará presidido por Mariano Rajoy, líder del PP.

Duran afirma estar dispuesto a 'implicarse' a fondo en la gobernabilidad española, sin descartar la entrada de CiU en el Gobierno, siempre y cuando se atiendan estas diez reclamaciones fundamentales.

Duran se ha mostrado convencido de que el panorama de crisis que se encontrará Rajoy a su llegada a La Moncloa le forzará a buscará complicidades y a llamar a la puerta de CiU, al margen del posible resultado electoral.

'Puede haber la tentación de venirnos a pedir apoyo parlamentario o la entrada en el Gobierno. Nosotros no podemos continuar haciendo lo mismo que en el pasado. Si nos implicamos, lo haremos a partir de una serie de condiciones. Nuestra prioridad no será entrar en el Gobierno, sino cumplir este decálogo', ha planteado.

Duran es consciente de que todo este pliego de condiciones será más factible de negociar si CiU parte de una posición de fuerza tras las elecciones del 20 de noviembre y si el PP no ha conseguido la mayoría absoluta que le pronostican todas las encuestas. Por eso, ha hecho un llamamiento al pueblo catalán a 'evitar' con su voto que el PP se lleve como mínimo la mitad más uno de los escaños del Congreso de los Diputados.

Prueba de que el electorado catalán tiene en sus manos la posibilidad de darle o no la mayoría absoluta al PP es que Rajoy vendrá a Catalunya para abrir su campaña, ha recordado Duran.

El candidato de CiU ha reconocido que le 'costaría entender' que el pueblo de Catalunya acabe permitiendo que socialistas y populares sean las dos fuerzas políticas más votadas en Catalunya, hipótesis que, en el caso de confirmarse, obligaría a abrir una 'reflexión' sobre los agravios que vienen denunciando los catalanes.

1. Resolver de una vez por todas el déficit fiscal de Catalunya, que según cifró ayer el conseller de Economía, Andreu Mas-Colell, se sitúa entre el 8% y el 8,5% del PIB catalán.

2. Dar prioridad al eje ferroviario mediterráneo, por el que ni PP ni PSOE han 'apostado' de manera clara por delante de la opción del corredor central, según Duran.

3. La construcción de cinco obras de infraestructuras 'básicas' para Catalunya: el Cuarto Cinturón, el desdoblamiento de la N-II, la N-340, la autovía Valls-Montblanc y la vía Lleida-Sopeira hacia Val d'Aran.

4. No dar marcha atrás en la descentralización de la gestión del aeropuerto de El Prat, así como la gestión catalana de los aeropuertos de Reus, Sabadell y Girona.

5. Resolver el problema de la financiación de las empresas, para que actúen de motor de la recuperación económica.

6. Presentar en Bruselas un 'plan financiero' que contemple la creación de un 'banco malo', donde se sitúen todos los activos tóxicos, y que permita que las entidades vuelvan a dar crédito.

7. Impulsar un 'plan de choque contra el paro' en apoyo a los emprendedores, una idea que ve más factible que otras acordar con el PP dadas sus coincidencias programáticas, así como medidas para pymes y autónomos, con un especial énfasis en 'no tocar ni una coma de la ley de morosidad'.

8. Ampliar en dos años la vigencia de la Disposición Adicional Tercera del Estatut, dado que el Estado no viene ejecutando la totalidad de sus inversiones previstas durante siete años en Catalunya.

9. Defensa acérrima de la política agraria para el litoral mediterráneo.

10. El PP 'no deberá utilizar nunca la lengua como instrumento de confrontación' ni cuestionar el sistema de inmersión lingüística.