El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, anunció ayer que revisará la paralización que se produce en la actividad procesal en agosto por razones históricas, ya que se trata de una costumbre que se daba en toda la Administración y que no es compatible con una Justicia competitiva.

En la toma de posesión de los altos cargos de su departamento, Gallardón expresó su deseo de que la Justicia avance en muchos sentidos, pero con los criterios de austeridad y eficiencia que les ha marcado el Gobierno, informa Efe. La revisión de la paralización de los procedimientos judiciales en agosto se revisará 'en aras de la necesaria y absolutamente imprescindible agilización' de la Justicia.

'Esta va a ser la legislatura de la gestión', con un mejor aprovechamiento de los medios, porque la crisis o las dificultades presupuestarias no pueden ser 'el pretexto' para no alcanzar los objetivos marcados. Ruiz-Gallardón aseguró que no se van a 'malgastar energías en mil direcciones a veces contradictorias entre sí'.

Como ejemplo de otra situación que hay que resolver, recordó que en 2010 se tramitaron en España más de nueve millones de asuntos, mientras que en Francia, con 19 millones de habitantes más, se tramitaron seis, por lo que hay que 'avanzar en austeridad y eficiencia', y reducir las dilaciones de los procedimientos que provocan la retención de millones de euros.

Ayer juraron sus cargos el secretario de Estado de Justicia, Fernando Román; el subsecretario de Justicia, Juan Bravo Rivera, y la directora del Gabinete del ministro, Cristina Coto del Valle.