En su intento por recuperar la confianza de los inversores y acelerar la recuperación de la economía española, el Gobierno volvió a reclamar, ayer la ayuda de los empresarios. '¡Que ponga algo de su lado!', reclamó el ministro de Fomento y portavoz del Ejecutivo, José Blanco, a la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE).

Desde la patronal, advirtió, 'mucho hablan de reformas, pero luego a la hora de la verdad tampoco ponen lo que pueden poner para que esas reformas vayan más deprisa y puedan ser acordadas'. Blanco se pronunció en estos términos en declaraciones a Punto Radio después de que la principal organización empresarial se mostrara en contra de anticipar el pago del impuesto de sociedades.

La vicepresidenta cree que adelantar más las elecciones restaría confianza

Esta es una de las medidas que prevé aprobar el Gobierno durante el Consejo de Ministros extraordinario, que celebrará el próximo día 19, pero que, según la CEOE, 'restará capacidad financiera a las compañías, lo que dificultará aún más los esfuerzos de estas por salir de la crisis'.

Ante esta respuesta, Blanco emplazó a los empresarios españoles a seguir el ejemplo de sus colegas italianos que se han prestado a adquirir deuda de su país. En este mismo sentido se expresó la vicepresidenta Elena Salgado en Onda Cero, quien consideró 'razonable' el anticipo del impuesto de sociedades propuesto por el Gobierno.

La también ministra de Economía quiso dejar claro que España 'está lejos de necesitar un rescate' y se mostró convencida de que la inestabilidad 'irá desapareciendo' a lo largo del mes de agosto.

El PP tilda de «demagógica» la propuesta sobre rentas de Rubalcaba

Rechazó por ello un nuevo adelanto electoral, tal y como lo ha solicitado el PP. En su opinión, poner una nueva fecha para los comicios 'no sería en absoluto ninguna buena noticia' ya que en este momento lo primordial es 'combatir la inestabilidad' aprobando medidas que ofrezcan 'confianza'.

Para el que será el candidato socialista en esa cita electoral, Alfredo Pérez Rubalcaba, una de ellas debe ser la creación de un impuesto para los bancos con el objetivo de reducir las cifras de desempleados. 'Los españoles vamos a hacer un esfuerzo prestando dinero a los bancos para sureestructuración, y una vez hecho es razonable que les pidamos un fondo de rescate', argumentó en una entrevista en Radio Euskadi.

Su propuesta llegaba 24 horas después de que instara a sindicatos y empresarios a mantener una reunión 'urgente' que permitiera un acuerdo para moderar salarios y beneficios con el objetivo de 'mejorar la competitividad' y crear empleo.

El PP se rebeló ayer en contra de esa propuesta de Rubalcaba. El vicesecretario de política autonómica de los conservadores, Javier Arenas, la consideró 'demagógica' en declaraciones a Europa Press. A su juicio, 'lo importante sería que, a través de la negociación colectiva, los trabajadores y empresarios conformen unos salarios de acuerdo con la realidad de las distintas empresas'.

Arenas advirtió que lo que no puede hacer el candidato socialista es 'cargarse por decreto-ley la negociación colectiva e imponer salarios a trabajadores y empresarios', porque, insistió, 'tienen que acordarlos ellos'. No juzgó efectiva la opción de incorporar un impuesto a los bancos y abogó por reducir las tributaciones de las pymes y los autónomos.