El presidente de la Junta de Andalucía, el socialista José Antonio Griñán, defendió ayer la labor del director general de Empleo, Daniel Rivera, el primer miembro del actual Gobierno andaluz imputado en el caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) fraudulentos. En declaraciones a los periodistas en un acto en Lora del Río (Sevilla), Griñán dijo que en el auto del pasado viernes que ha hecho reventar las alarmas en el PSOE andaluz a dos meses de las autonómicas la magistrada Mercedes Alaya no le imputa ningún delito concreto. 'De todo aquello que le dice que pudo hacer y no hizo, he de recordar que él solamente se limita a hacer una orden de pago de un expediente de cuatro años antes de su llegada', explicó Griñán, informa Efe.

La jueza se remite a una póliza de prejubilación de la empresa Surcolor tramitada en 2006 por Francisco Javier Guerrero, eje clave de las presuntas irregularidades, en la que se incluyen dos intru-sos, es decir, dos personas que cobraron sin haber trabajado en la empresa. Posteriormente, añade la magistrada, los dos directores que relevaron a Guerrero, Juan Márquez también imputado y Rivera, continuaron orde-nando los pagos conociendo presuntamente el fraude.

Rivera, según la Junta, ha sido uno de los responsables directos de la investigación desarrollada por la Administración autonómica para detectar a los intrusos. Sin embargo, preguntado por Márquez, Griñán afirmó: 'Estoy hablando del actual director de Trabajo, que es el que tengo'. Sobre el PP y las elecciones, aseguró: 'Difícilmente va a poder vender algo que no sea esto'.